Jürgen Rieger, dirigente neonazi
Jürgen Rieger no tendrá tumba, porque sus hijos no quieren atraer romerías neonazis con una lápida. El dirigente del Partido Nacional Democrático (NPD) y millonario alemán Jürgen Rieger murió el jueves en Berlín, a los 63 años. A Rieger, negacionista, antisemita, racista contumaz y nostálgico de la Alemania de Adolf Hitler, incluso la formación antidemocrática y ultraderechista NPD le parecía moderada y aburguesada. Sin embargo, las constantes dificultades económicas del partido y sus aspiraciones de salir a la palestra política llevaron a su incorporación en 2006.
En esos años, los neonazis alcanzaron varios éxitos electorales con la entrada en los parlamentos regionales de Sajonia (2004) y Meckelmburgo-Pomerania Occidental y en diversos ayuntamientos de todo el país.
Rieger hizo buenos negocios inmobiliarios. Según informaciones que dan como fuente a los servicios secretos internos (Verfassugsschutz) uno de los trucos para dar pelotazos es que el partido muestre interés por algún edificio en una ciudad pequeña. El rechazo público lleva a los ayuntamientos a sobrepujar la oferta del NPD, con el consiguiente beneficio para los propietarios.