Navarro está "contento" por despedir a la tránsfuga de Zaplana

El nuevo alcalde de Benidorm, el socialista dado de baja en el PSPV-PSOE Agustín Navarro, confesó ayer, pocos minutos después de ser elegido mediante una moción de censura, sentirse "muy contento" por echar del Ayuntamiento a la concejal tránsfuga socialista Maruja Sánchez, que en 1991 hizo posible la moción de censura que dio la alcaldía a Eduardo Zaplana.

En aquella ocasión, Sánchez, que dejó en minoría al PSPV-PSOE para propiciar la llegada del PP, mantuvo su acta en la corporación hasta 1995, momento en que dejó la vida política en activo y desde entonces era asesora de la Concejalía de Cultura. En los últimos años, los socialistas habían denunciado públicamente que "nadie en el Ayuntamiento conocía bien qué función desempeñaba" Sánchez e, incluso, que desde hacía seis años no aparecía por su despacho. En sus reiteradas críticas por la contratación de la tránsfuga Maruja Sánchez, los socialistas cifraron en más de 460.000 euros el dinero percibido por aquella en los últimos 18 años.

Navarro recordó que Sánchez y los 32 cargos de confianza del ya ex alcalde, Manuel Pérez Fenoll (PP), quedan destituidos automáticamente con el cambio de gobierno. "No tengo que firmar el cese, pero dicho esto, estoy muy contento de que no se le siga pagando el favor del año 1991", subrayó. En cuanto al minuto de silencio simbólico del Grupo Popular para denunciar la "defunción" de la democracia en Benidorm, Navarro se limitó a señalar que su hasta hace unos días partido político, el PSPV-PSOE, ha reiterado que "quien ha roto sistemáticamente el Pacto Antitransfuguismo y en Benidorm lo hizo es el PP". Debido a que tanto él como sus compañeros de grupo ya no militan en el PSPV-PSOE, Navarro ha aclarado que a partir de ahora gobernará con la denominación de Grupo Socialista de Benidorm. "Ya no pondremos al lado PSPV-PSOE, porque no podemos. No tenemos el carné, pero sí lo llevaremos en el corazón", reconoció.

Tras el pleno el nuevo gobierno celebró la elección con una comida y luego celebraron su primera reunión en la alcaldía para dar competencias. Entre otras, el tránsfuga, José Bañuls, será teniente de alcalde y concejal de Movilidad y Participación Ciudadana, Jaime Llinares asume el área de Urbanismo y Patrimonio, Maite Iraola llevará Cultura y Sanidad, Natalia Guijarro, Hacienda, y Conrado Hernández, Policía.