Feijóo pide "grandeza" a PSdeG y BNG para pactar los recortes

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, pide ayuda "para cuadrar el presupuesto más dificil de la historia autonómica". Más que una llamada al consenso, lo de ayer tras el Consello de la Xunta pareció más bien un auténtico SOS. El primer semestre de la legislatura lo pasó criticando las cuentas heredadas del bipartito, pero ahora es Feijóo quien debe hacer sus propios números. Y su momento le ha llegado en un contexto de caída de los ingresos de la comunidad -un 18% que todavía podría empeorar hasta final de año- y con la obligación de devolver 1.900 millones de euros a partir de 2011, que el Estado ya gastó en Galicia.

Ese escenario económico y el accidentado inicio de curso -con protestas de sindicatos, profesores, médicos, sindicatos y una oposición frontal en el Parlamento- contra los primeros recortes en sanidad y educación forzaron al jefe del Ejecutivo a buscar el concurso de Bloque y PSdeG para diseñar el nuevo presupuesto. "Una situación excepcional requiere un comportamiento político excepcional". "Espíritu de grandeza"... se explayó el presidente de la Xunta con su "mano tendida a la oposición". Lo que persigue es un acuerdo que compense los 1.500 millones de euros que la Xunta ya no recaudará este año vía impuestos. "Y por el Gobierno no va a quedar..."

"El gasto social aumentará cuantitativamente y en tanto por ciento"

La oposición dice que el presidente no tiene credibilidad en política social

Para lograr el apoyo a sus cuentas, Feijóo fue un paso más allá y anunció directamente que en 2010 el gasto social aumentará no sólo porcentualmente, también en términos absolutos. La promesa deja poco margen a la Consellería de Facenda para los recortes, ya que el dinero que destinó el bipartito a educación, sanidad y dependencia fue el 57% de los 11.793 millones de euros presupuestados para este ejercicio. El presidente se propuso predicar con el ejemplo y adelgazar todo tipo de facturas (viajes, comidas, dietas, comunicaciones y energía) hasta "ahorrar el 15% de todo el gasto de funcionamiento de la Xunta", que evitó cuantificar. Sí avanzó que su gabinete recurrirá al endeudamiento "productivo y prudente", sin detallar si llegará a agotar el máximo legal permitido a la Xunta, un 2,5% del PIB.

Si explicó que las previsiones de su Ejecutivo parten de que la economía gallega crecerá con el Xacobeo en 2010 un 0,7% del PIB, siete décimas por encima de lo que calcula el Ministerio de Economía para el resto de España.

El pacto sobre las cuentas púbicas no será fácil con la oposición que todavía tiene fresca la respuesta del PP a los últimos presupuestos del bipartito. El portavoz parlamentario del PSdeG, Xaquín Fernández Leiceaga, recuerda que al mismo tiempo que su partido se comprometió a apoyar las cuentas de todas las instituciones, el PP inició en Galicia una dura campaña contra sus cuentas: "No sérá fácil el acuerdo si persisten medidas como la supresión de la gratuidad de los libros de texto y los recortes en sanidad".

La voz del BNG en el hemiciclo, Carlos Aymerich, ironizó sobre la política social del PP. "¿Qué credibilidad tiene quien ni siquiera ejecuta lo que el anterior Gobierno dejó para libros de texto, galescolas o centros de día?", lamentó el parlamentario nacionalista.