Las rupturas

Todo explota: la crisis, la gripe; estornuda el universo. A Zapatero se le pusieron ojeras instantáneas. Como si se le hubiera agotado el sol y le vinieran las sombras del futuro. Así es la vida. Y lo notan los informativos, vaya que sí. Han venido con ímpetu. Y con los augurios oscurecidos, como si a la vida le hubieran salido ojeras.

Tiempos oscuros. Como si le hicieran caso a Brecht (también se cantará en los tiempos oscuros), han venido vestidos de blanco. Ana Blanco se estrenó vestida de su apellido en La 1, y Pepa Bueno iba de blanco en el segundo telediario de la pública. Ayer Ana Pastor hizo sus segundos desayunos también vestida de blanco, y sus tertulianas (Nativel Preciado, Esther Palomera) iban de blanco también. Iñaki Gabilondo (con Silvia Intxaurrondo) madruga en la noche; comenzó, en Cuatro, con camisa blanca, un informativo que traía las balas del otoño. Él añadió una, la conducta del PP soliviantando con denuncias que luego no sustancia. A Cospedal, dijo más o menos, le quedan dos telediarios si no justifica su exabrupto. Iñaki trae mucha información social; abre los micrófonos, como antiguamente.

Ana Pastor (que parece que siempre hizo antes los desayunos, como Pepa Bueno parece que hizo siempre el telediario que hacía Lorenzo Milá) le preguntó a Juan José Güemes (consejero de Esperanza Aguirre): "¿Veremos las pruebas?". Güemes se fue por las peteneras que ya escuchamos en agosto. Parece que Soraya Sáez de Santamaría hizo un informe, pero ¿y las pruebas? Ímpetu también después de Iñaki: Manu Carreño y Nico Abad presentan los deportes como si corrieran una maratón, riendo. Está bien: ría después de haber temblado.

Vi a Javier Ruiz (con Mónica Sanz, en Cuatro) diciendo la palabra agujero, por el déficit, y parecía que el agujero se hacía más grande. Pedro Piqueras (ahora a mediodía en Telecinco) reprodujo la denuncia (y luego el desmentido) de Aguirre sobre las supuestas escuchas de Rubalcaba. Entre risas: ella hace temblar entre risas. Me gustó una frase que Cándido Méndez (UGT) le dijo a Ana Pastor: Díaz Ferrán (CEOE) protagonizó ante Zapatero "una ruptura innovadora: dijo una cosa e hizo otra". Nos vamos a acostumbrar a las rupturas innovadoras hasta que nos quemen las pestañas.