Un espectáculo con mucha prisa en la cuarta de Sanse

Chupinazo puntual y arranque. Así fue la carrera más multitudinaria hasta ahora de todos los festejos. "La más espectacular", en palabras de los organizadores. Cerca de 4.100 corredores participaron ayer a las 8.00 en el cuarto encierro de las fiestas de San Sebastián de los Reyes, con seis toros de Victoriano del Río.

Miles de curiosos se agolpaban tras las barreras. Casi no quedaba hueco para mirar. Policías y personal de Protección Civil (unos 400 efectivos velan por la seguridad de los encierros) peinaron varias veces el recorrido vallado en los minutos previos a la salida. Ejecutaban lo que recomendaban de forma insistente los altavoces: fuera de la carrera quienes aparenten síntomas de haber ingerido alcohol, los que pretendan correr con calzado incómodo o con bolsos, con sombreros o gorras. Ningún menor de 16 años debía estar cerca de los astados.

Se esperaba una carrera difícil por el aumento de participantes y de público debido al fin de semana, pero resultó bastante rápida (un minuto y 57 segundos, casi 15 segundos más que el viernes) y limpia. Hubo seis heridos leves. Ninguno requirió asistencia sanitaria como ocurrió la mañana anterior, con 11 participantes trasladados al hospital Infanta Sofía. Los lesionados fueron atendidos por diversos golpes y dados de alta durante la tarde del viernes.

El grupo de astados se dividió: dos toros encabezaron desde la calle Real Vieja el recorrido seguidos por los corredores y se adelantaron más de 10 segundos al resto. Varios cabestros y de toros resbalaron y cayeron, pero no hubo que lamentar incidentes. "Estamos francamente satisfechos del desarrollo", explicó al final de la carrera Emilio Esteban, director técnico del encierro. "Ha sido una carrera bellísima desde el principio", añadió el concejal de Festejos, Alberto Matiaces. Los encierros continúan hoy. También se espera mayor afluencia que entre semana.