Gracia y descaro
Conviene echarle humor a la sequía musical veraniega. Madrid es un auténtico desierto estos meses. A falta de grandes orquestas, óperas de postín y solistas virtuosos, nunca está demás echarse hoy unas risas con La corte del faraón en los jardines de Sabatini. Esta zarzuela, revista, comedia, lo que ustedes quieran, conserva la gracia, el descaro y su más que sano cachondeo. Probablemente Vicente Lleó, autor de la partitura, y los libretistas Guillermo Perrín y Miguel de Palacios no cayeron en la cuenta de que su disparate sobre el enredo de la corte egipcia a base de los amores entre la esposa del general Putifar y el casto José, no pasarían el filtro del tiempo. Pero lo lograron.
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