Rouco celebra en Mondoñedo sus 50 años como sacerdote
Dos obispos, familiares y amigos arropan el homenaje
El cardenal Antonio María Rouco Varela interrumpió ayer las vacaciones en Vilalba y se arropó de sus amigos para celebrar sus 50 años de vocación religiosa. La diócesis de Mondoñedo-Ferrol organizó un homenaje al vilalbés al que, además de autoridades religiosas, asistieron numerosos fieles que abarrotaron la catedral de Mondoñedo.
Oficialmente, Rouco ya celebró sus bodas de oro en Madrid a finales de marzo, pero la diócesis de Mondoñedo quiso organizarle un "acto sentido, más bien privado". El cardenal se rodeó en esta fecha del obispo de la diócesis de Mondoñedo-Ferrol, Manuel Sánchez Monge, y del obispo de Lugo y sobrino suyo, Alfonso Carrasco Rouco. Con éste, hijo de su hermana, protagonizó, uno de los momentos más emotivos al fundirse en un prolongado abrazo. También estuvieron presentes otros sobrinos suyos y su hermana, sentados en primera línea en la catedral.
El cardenal revivió sus partidos de fútbol y sus veranos de la infancia
Los actos comenzaron con una misa que celebró el propio presidente de la Conferencia Episcopal. Posteriormente, se celebró a puerta cerrada un coloquio - tertulia en el seminario de Santa Catalina, del que fue Rouco alumno y profesor. Allí revivió anécdotas como los partidos de futbito que enfrentaban en el patio interior del seminario a los entonces futuros sacerdotes de la costa contra los del interior o sus días en los campamentos de verano en A Devesa o Gandarío. Al término de este encuentro, la diócesis entregó al cardenal un cuadro en plata que reproduce el antipendio (tapiz que se coloca en la parte frontal) de la catedral mindoniense. Este detalle estaba grabado con una dedicatoria.
El punto final a las celebraciones fue una comida privada. Los sacerdotes acudieron a la cita invitados por el vicario Antonio Rodríguez Basanta. Además, se rindió tributo a unos 60 párrocos, que celebraban también su cincuenta aniversario religioso.
Rouco Varela no sólo nació en Vilalba sino que celebró allí su primera misa. Sus primeros años de estudio están estrechamente unidos a Mondoñedo, en cuyo seminario estudió antes de viajar a Salamanca para prolongar su formación. Años más tarde, el hoy cardenal volvió al seminario de este ayuntamiento del norte de Lugo, donde impartió clases de Teología Fundamental y Derecho Canónico, materias que enseñó avalado por su doctorado de la Universidad de Múnich. Como arzobispo de Santiago fue uno de los más activistas en la organización de la visita del papa Juan Pablo II, en 1982. Rouco Varela alcanzó la categoría de arzobispo de Madrid en 1994, y cuatro años más tarde Juan Pablo II lo nombró cardenal. Preside por segunda vez la Conferencia Episcopal desde marzo de 2008.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.