"No me molesta que me llamen tecnócrata"

Pregunta. Usted está considerado un técnico muy cualificado y ahora ocupa el puesto más político del Gobierno andaluz. ¿Cómo se ha acomodado al cambio?

Respuesta. He sido director general de Fondos Europeos y secretario general de Economía, donde se tiene una visión horizontal del Gobierno desde una perspectiva económica y, relativamente, política. El puesto de consejero es muy diferente, más amplio, hay una mayor exposición, en su sentido literal, a la opinión pública, al debate, al Parlamento. ¿Cómo me adapto? Con 44 años, también como una parte del aprendizaje vital que uno tiene en esta aventura que ya dura 13 años en la Junta.

P. ¿Le molesta que le llamen técnico, burócrata?

"Nunca utilizaría el calificativo de losa para definir la herencia de Zarrías"

"No tengo dudas de que Griñán será el candidato a la Junta"

"La sobreactuación de Andalucía en la financiación no se habría entendido"

"Griñán ha llevado la educación al primer plano del debate político"

R. Yo estudié en la Universidad de Málaga, gracias al esfuerzo de mis padres y al mío propio, porque tuve luego una beca; después tuve la oportunidad de ampliar mis estudios en la Autónoma de Barcelona, en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Modestamente, uno cree que ha cumplido una etapa de formación de manera sólida. A mí no me molesta que me llamen técnico, tecnócrata, porque uno tenga esa preparación. Creo que es positivo que la toma de determinadas decisiones se pueda hacer desde un cierto conocimiento en un área como la económica. Y en este Gobierno se ha dado una situación social previa, porque la gente que ahora tiene en torno a 40 ó 50 años empezó a tener la oportunidad de estudiar en su día.

P. ¿Le pesa la losa de Gaspar Zarrías, su antecesor?

R. En absoluto, no me pesa la losa ni del anterior consejero ni del secretario general del PSOE de Jaén. Me he encontrado con una consejería bien organizada, con un trabajo desplegado impresionante y con capital político acumulado. Nunca utilizaría el calificativo de losa para definir la herencia de Gaspar.

P. ¿Es verdad que el señor Griñán le recomendó que se afiliara en el PSOE de Jaén porque allí la inteligencia se valora?

R. Es cierto, lo cual no quiere decir nada más que en Jaén la inteligencia se valora.

P. Los periodistas dicen que el Gobierno tiene un problema de comunicación. ¿Lo percibe?

R. Si el Gobierno tiene que realizar un esfuerzo de comunicación y quien tiene que transmitirlo son los periodistas y esa es su opinión, pues tendrá que ser sometido a reflexión. Se ha producido un cambio de Gobierno. Las personas, los perfiles, el conocimiento común de unos y de otros ha cambiado, y eso genera hasta equivocaciones o restricciones respecto a la situación anterior.

P. ¿Cómo vivió la rumorología de la sucesión de Chaves?

R. Con total tranquilidad, expectación y conciencia del momento político histórico que se estaba viviendo. Se pasaba de un Gobierno en el que estaba Manuel Chaves de presidente a otro en el que está José Antonio Griñán, que era vicepresidente. A la oposición la ha dejado fuera de juego. Existía la intuición de que podría ser una situación difícil dentro del partido y del Gobierno. Y no lo ha sido.

P. ¿Hay preocupación sobre si el candidato será o no Griñán?

R. No me preocupa porque no tengo dudas de que será candidato. El presidente Griñán, cuando acudió al comité director del PSOE, dijo que presentaba un proyecto que era para hoy, para mañana y para pasado mañana. Y eso tiene un valor simbólico de proyecto de largo recorrido y con esa perspectiva trabajamos.

P. ¿Cuál es su valoración de los 100 días del nuevo gobierno?

R. No es por presumir, pero la reflexión que se está haciendo es que se han hecho muchas cosas en poco tiempo. Se han tomado decisiones con un hilván muy claro y un trazo grueso, vinculadas a la situación de crisis y las consecuencias sobre el empleo y sobre la renta. Y luego hay otro ámbito que tiene que ver con decisiones más estructurales. El presidente ha insistido en la educación a la que, vista la perspectiva de estos tres meses, ha llevado al primer plano del debate y de los contenidos de la discusión política de las preocupaciones sociales. Luego ha habido otros temas en los que uno se puede sentir orgulloso, como el de presentar en el Parlamento las leyes de Vivienda y de la Muerte Digna.

P. Griñán ha dicho que los partidos catalanes han sobreactuado mucho en el tema de la financiación, pero tal vez ustedes han pecado de discretos.

R. Seguramente, la responsabilidad y la humildad a veces puede parecer que no permiten alcanzar cierta relevancia en los medios, pero sí cierta eficacia. La sobreactuación de algunos ha sido evidente. Pero sobreactuar desde la perspectiva de quien tiene la posibilidad, como tiene el Gobierno de Andalucía, de abrir cauces de comunicación en un proceso en el que mucha gente tiene que tomar decisiones, a lo mejor no se hubiese entendido. También ha habido otras formas de sobreactuación, como la del PP. Se puede dar la paradoja de que un partido vote sí, no y abstención a la financiación.

P. El Gobierno no da los datos del reparto. ¿Cómo lo ve?

R. No lo veo ni bien ni mal. Es un método el que se aprueba, sobre la base de unas estadísticas y de unos datos de las comunidades autónomas que aparecen en los anexos del documento y al que cada comunidad autónoma puede replicar. Seguramente eso aleja del debate si una comunidad autónoma está por encima o está por debajo y lo centra en los criterios, que es lo relevante políticamente.

P. ¿Es posible mantener el Pacto del Saray hoy?

R. Son quienes lo firmaron quienes tendrán que decir si hay que mantenerlo o reformularlo. A veces conviene, cuando pasa un cierto tiempo, adaptarse a las nuevas circunstancias. Para mí una cuestión relevante es que CajaGranada, que es la que es objeto del pacto del Saray, en este momento, al margen de lo que unos interpreten y otros quieran, está donde han querido sus órganos de gobierno.

P. ¿Pero se puede mantener autónoma en un futuro?

R. A la luz de la información que publica el Banco de España, CajaGranada tiene sus ratios de solvencia y de morosidad aceptables, aunque afectados por la situación de crisis como todo el sector, pero ¿quién tiene que tomar la decisión de si su futuro es en solitario o no? La tienen que tomar sus órganos de gobierno. Así de fácil pero también así de complicado. CajaGranada no está inmersa en ningún proceso de fusión, pero la situación no pasa necesariamente por que uno esté en un punto o en otro, hay situaciones intermedias, siempre debe existir la posibilidad de cooperación en otros ámbitos, sin que necesariamente se deba culminar la cooperación con una fusión.

P. Gibraltar sigue sin participar en el grupo de trabajo que se creó con la Mancomunidad del Campo de Gibraltar y la Junta. ¿Hasta cuándo van a esperar a los gibraltareños?

R. El otro día, a raíz de la visita de Moratinos, el consejero de Gobernación estuvo presente para poder avanzar en ese sentido. Ese tema se va a impulsar, porque ahí, en esa cuestión, nuestra perspectiva es de absoluto pragmatismo. Lo que se pueda hacer para contribuir a mejorar la vida de las personas, lo haremos.

P. ¿Ve Canal Sur?

R. Veo poco la tele. Entre semana, por la noche, algún telediario...

P. ¿Y qué le parece?

R. Desde la perspectiva de los informativos, creo que se hace una labor meritoria. El hecho de ser pública y tener público refuerza su carácter. En el resto, hay programas con los que puedo sentirme más cómodo y programas en los que menos, pero desde luego no soy un devorador de televisión. No porque no me guste, sino por mi horario de trabajo.