Un muerto y 3.000 hectáreas devoradas por el fuego en Agramunt
El fuego ya ha quemado este verano casi 5.000 hectáreas y ha causado tres víctimas
Una persona de edad avanzada, cuya identidad no se conocía a última hora de anoche, murió en el peor incendio que ha asolado las tierras catalanas en lo que va de año. Los bomberos encontraron a la víctima junto a un coche volcado al borde de un bancal en el municipio de Cabanabona (Noguera).
Es ya la tercera víctima mortal de los fuegos que se han declarado este verano, en el que ya se han calcinado casi 5.000 hectáreas. El 23 de junio pasado, los dos ocupantes de un helicóptero que volvía de colaborar en la extinción de un incendio en Les Franqueses del Vallès murieron al caer su nave. Si el de entonces fue pequeño, el fuego que se declaró en Agramunt adquirió una dimensión descomunal. A las 23.20 horas ya se habían quemado más de 3.000 hectáreas, principalmente de campos de cultivo ya segados, en las dos poblaciones leridanas, así como en Oliola. Este municipio y Cabanabona ya sufrieron dos de los incendios que se declararon en la misma zona rural a principios de este mes. Las llamas asolaron la mitad de hectáreas, 1.500, de las que 1.100 eran campos de cereales. La Generalitat prohibió entonces las labores agrícolas durante dos días en las horas más cálidas de la jornada por considerar que las máquinas de siega podrían haber causado algunos de los incendios. Eso provocó las iras de los payeses, y su sindicato Unió de Pagesos cortó carreteras para protestar por la medida. Tras levantar la prohibición, el consejero de Medio Ambiente, el ecosocialista Francesc Baltasar, no descartó volver a aplicarla si se repetían las condiciones meteorológicas adversas.
Ayer sopló un fuerte viento en la Noguera, que no fue la única zona que sufrió las llamas. También quemaron 200 hectáreas en Cervera (Segarra) y tres en Roda de Barà (Tarragonès). Las llamas obligaron a confinar a la población de Sanaüja y a cortar varias carreteras. Si en Lleida se trató de vías comarcales, a la altura de Roda de Barà se tuvo que cerrar la N-340.
El consejero de Interior, Joan Saura, se desplazó a la zona del incendio de Agramunt al saberse la noticia de la muerte de una persona para dirigir los trabajos de extinción.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.