El Barça renegocia con la banca

Las mieles por haberse marcado un triplete inédito en el fútbol español y la lluvia de dinero de la Champions no le están ahorrando al Barça tener que jugar ahora un partido veraniego, y no necesariamente amistoso, con los banqueros. Y es que el entusiasmo de la grada no es exactamente el mismo que el que rezuman los despachos a la hora de hacer números. Los ingresos en que ha derivado la coronación en Roma ante el Manchester United se quedan cortos al medirlos con las primas que se ha embolsado el equipo de Guardiola por haber vuelto a casa con la Liga, la Copa del Rey y la Copa de Europa. ¿Cuánto de cortos? El saldo, negativo, oscila "entre 17 y 20 millones de euros", estima un alto directivo del club.

El club no contaba con pagar las primas de 16 y 9 millones por la 'Champions' y la Copa

El FC Barcelona ultima la renegociación del crédito sindicado que cerró con una decena de bancos hace casi seis años: La Caixa (30%), la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM, 14%), el Banco Popular (14%), Caixa Catalunya (10%) y, el resto, Cajamar, Banc Sabadell, Banesto, Barclays, Deutsche Bank y Banco de Valencia. Ese capote financiero era suculento en millones e incluía un doble salvavidas: un primer tramo de 92,5 millones de euros en dinero contante y sonante que el club finiquitó el pasado 30 de octubre. Quedaba lo que los técnicos llaman el tramo B: una línea de avales por 113,5 millones.

El destino de esos avales no sólo era sacar el lazo para fichajes -apartaron 45 millones con tal fin-, sino borrar alguna herencia del pasado. La institución presidida por Joan Laporta, que se mueve ya sobre un fondo preelectoral -las elecciones son en 2010-, arrastra como lastre los avales que pesan sobre las actas fiscales levantadas al club durante la presidencia de Josep Lluís Núñez entre 1990 y 1993 y 1993 y 1995, por importe de 63,6 millones.

Los bancos, liderados por La Caixa, ultiman la renovación del macrocrédito sindicado de seis años atrás, que los blaugrana desean alargar hasta junio de 2012. El acuerdo podría llegar en un par de semanas, según distintas fuentes financieras. Por una parte, el club negocia abrir una nueva póliza de crédito por valor de 35 millones de euros. Y, por la otra, reabrir el citado tramo B y aumentar de 113,5 a 120 millones los mencionados avales. Eso, según fuentes del Barça; fuentes financieras elevan la cifra sobre la que se discute a 60 millones.

Una explicación a esta nueva llamada a la puerta de la banca pasa por la propia cosecha excepcional de victorias. Al Barça se le ha atragantado en primas. Los incentivos que perciben los jugadores por embolsarse la Liga, que ascienden a 14 millones, estaban perfectamente contemplados en el presupuesto de la entidad. Pero la directiva de Laporta no era muy crédula sobre el milagro del triplete y el presupuesto no preveía los 16 millones extras que toca pagar al equipo por su triunfo europeo, ni tampoco la zanahoria de nueve millones más que lleva aparejada la Copa del Rey.

Las primas no son, sin embargo, el único factor que ha provocado tensiones de tesorería. Este año la liquidez del Barça ha debido encajar otros pellizcos. Ahí está la sentencia que le ha obligado a pagar casi 60 millones a Sogecable por derechos de retransmisión internacionales. Y los 30 millones que TV3 se ha negado hasta ahora a pagar al club por los derechos que la temporada pasada dejó de percibir de Audiovisual Sport (la cadena tiene el 20% de esta sociedad). Un pacto sobre este desencuentro que llevó al Barça a pedir en febrero pasado otros 30 millones a La Caixa, está ya encauzado, subraya el club.

En agosto próximo, el Barça, cuya deuda neta ronda los 180 millones, presentará el cierre del ejercicio, decisivo para evitar el aval de la Liga en el futuro. Y se espera una ganancia de entre dos y seis millones. No es exactamente la diferencia entre ingresos y gastos presupuestados en la última asamblea de socios y que ascendía a 25 millones.