Manolo García salda cuentas en Vigo y Ourense

El verano pasado muchos de sus seguidores se quedaron con las ganas. Antes de que las entradas saliesen a la venta, se anuló el concierto que estaba anunciado en Vigo dentro la gira de presentación del último disco de Manolo García, Saldremos a la lluvia (2008), el cuarto desde que hace más de una década el músico barcelonés emprendiera su carrera en solitario. "No me gusta que pasen estas cosas, así que si se publica una fecha y después no se cumple, yo me lo apunto y procuro cumplir después; forma parte de mi oficio", dice el artista.

La cuenta pendiente se saldará este mes por partida doble. Manolo García actuará mañana en Vigo (en Pavillón das Travesas) y el día 20 en Ourense (en el Polideportivo Paco Paz), donde prevé interpretar muchos de sus temas nuevos y versionar canciones antiguas, para regocijo de sus fans. En las dos ocasiones, buscará la máxima complicidad con el público con un espectáculo diseñado por él mismo que incluirá, entre otros materiales audiovisuales, muestras de sus otras dos facetas artísticas: la pintura y la fotografía. "Acostumbro a pintar algo para los conciertos para significar que el escenario es mi lugar propio, mi casa, y hacer sentir a las personas a quienes convoco que están invitadas a un espacio personal".

Este compositor de maduración lenta reconoce que necesita apartarse de la velocidad de las giras para crear nuevas canciones, de ahí las pausas prolongadas entre la salida de cada disco (el primero en 1998, seguido de los que publicó en 2001, 2004 y 2008). "El vértigo de la carrera te emborracha y hacer música es vivir, de modo que para percibir más cosas debo andar a paso de viandante, caminar y no correr", explica el ex componente de El Último de la Fila.