"2010 y 2011 serán más difíciles para el sector que 2009"

Ignacio Mataix (Madrid, 1962), director general de Industria de Turbo Propulsores (ITP) sólo tiene residencia fija en Madrid los fines de semana. Recibe a EL PAÍS en la Planta del Parque Tecnológico de Zamudio (Vizcaya), su sede central. Llegó a la firma, que celebra este año su 20º aniversario, en 2004. No quiere revelar los resultados de 2008 "porque están pendientes de la auditoría", pero asegura que serán positivos, como los de los años venideros. ITP es una empresa de motores de aviación joven que compite con otras que le llevan 20 o 30 años de ventaja. Su objetivo es acortar distancias, para lo que cree fundamental el carácter industrial de sus dos socios, la ingeniería Sener (la familia Sendagorta) y Rolls Royce, que apuestan por proyectos a largo plazo. Cree que la Bolsa está bien para las empresas maduras, pero ITP está aún en fase de crecimiento. La crisis afecta ya al mundo aeronáutico, y Mataix, licenciado en Derecho y Económicas, no descarta que haya cierres o integraciones.

"Hay pocas órdenes nuevas y aumentan las cancelaciones"

"Es estratégico para el sector lograr financiación pública"

"Hay muchos aviones antiguos y hay que hacer un reemplazo de flota"

"Los Gobiernos deben centrarse en apoyar el I+D industrial"

Pregunta. ¿Hubo un momento en que parecía que el sector aeronáutico se libraba de la crisis?

Respuesta. Nadie se libra de esta crisis. Quizá la notamos un poco después. El tráfico aéreo ha caído en los últimos meses de manera dramática, y hace muy pocos meses que las compañías aéreas han empezado a retrasar pedidos. Hay pocas órdenes nuevas y aumentan las cancelaciones.

P. Plantearon un ERE hace unos meses y luego lo retiraron. ¿Aguantarán? ¿Se ha aplazado?

R. Planteamos un ERE porque ITP es todavía una empresa poco madura en la que todos los programas están en crecimiento. Hemos preparado un aumento de nuestra capacidad de personal e industrial hasta 2011. Estamos estudiando si podemos conseguir no hacer un ERE. Tenemos que valorarlo conforme a la carga de trabajo de la segunda mitad del año. Los años 2010 y 2011 van a ser mucho más difíciles para el sector que 2009, y entonces tendremos que tomar una decisión.

P. ¿Tiene miedo, pese a que sus proyectos están en fase de desarrollo?

R. Estamos ofreciendo los motores que se van a instalar en los aviones que se van a entregar en 2010. La incertidumbre es saber cómo va a afectar la crisis a la carga de trabajo en 2011 y 2012, si se van a producir mayores cancelaciones. Vienen años muy complejos.

P. ¿Reducir personal puede ser un problema para una empresa que está siempre a la caza de talentos?

R. Nos hemos sabido manejar hasta ahora. ITP tiene un empuje tecnológico muy significativo. Somos un polo de atracción de personas en Bilbao y Madrid y en el resto de las instalaciones. Prescindir de plantilla tanto en la fábrica como entre los ingenieros como consecuencia del periodo de reducción de carga es muy perjudicial. Intentamos retrasar las medidas y recurrir a soluciones temporales, a bolsas de trabajo.

P. Acaban de cerrar un contrato para el motor Trent XWB que irá en el nuevo Airbus A-350. El proyecto les exige una inversión de 250 millones, una cantidad mayor que los recursos que generan, según han reconocido. ¿De dónde van a sacar el dinero en un momento en que los mercados financieros están secos?

R. Es un momento complicado, pero ITP no se puede permitir no estar en los programas estratégicos de futuro. Tenemos que invertir en todos los programas que vayan a desarrollar nuestros clientes. La capacidad de generar caja es importante, a pesar de las inversiones, pero es fundamental y estratégico en el sector conseguir financiación pública de acuerdo con el marco comunitario, que no ayudas o subvenciones. Es esencial que el Gobierno español y el vasco se tomen el sector aeronáutico como un motor de crecimiento y obtengamos mejor financiación de la que estamos obteniendo hoy y a más plazo.

P. ¿Pero aún no tienen cerrada la financiación de este proyecto?

R. No está todavía cerrada. Nosotros tomamos el riesgo porque es una industria de riesgo y no puede ser de otra manera. No podemos preconcebir la financiación antes de tomar el riesgo, y contamos que con la capacidad tecnológica de la compañía conseguiremos financiar los proyectos. Hemos financiado proyectos que triplican nuestros recursos propios en los últimos siete años.

P. ¿Las inversiones que tienen pendientes para estos proyectos, dónde se van a hacer? ¿Hay planes de deslocalización? ¿Tal vez en su nueva planta de México?

R. Zamudio y Madrid son los centros industriales donde vamos a tener los productos de mayor valor añadido. Somos un suministrador de primer nivel. Sólo hay cinco compañías en el mundo capaces de hacer lo que hace ITP y lo tenemos que proteger. Hay componentes estratégicos que decidimos fabricar internamente y hay otros menos estratégicos que decidimos fabricarlos fuera o en otras instalaciones. Competimos en mercado global y debemos mirar a nuestros competidores para ver qué es lo que están haciendo. Vamos a seguir desarrollando fabricación en otros países con un coste más competitivo que el que tenemos aquí.

P. ¿No es necesario ampliar instalaciones por el parón del que hablaba?

R. Soy optimista. Va a haber un parón, pero nuestras decisiones estratégicas son a largo plazo. Habrá un valle, pero el crecimiento del sector aeronáutico es evidente. Hay un número muy elevado de aviones y motores con antigüedad y hay que hacer un reemplazo de flota sustancial. No se ha hecho en el pasado por el retraso en programas como en el A-380 o el Boeing 787. Con el reemplazo veremos un crecimiento claro y seguiremos ampliando nuestras instalaciones. ITP está en el segmento de avión grande, de doble pasillo. La mitad de los aviones que vuelen tendrán en breve la turbina de baja presión de ITP. Hay que ver qué pasa con el avión medio, pero el grande es un segmento muy protegido. Podemos encontrar alternativas de transporte en Europa, pero no para volar entre Singapur y Londres.

P. Se ha puesto de moda la innovación, pero ustedes ya ocupan los primeros puestos en España en la ratio de gasto en investigación en relación con la facturación. ¿Habrá recortes por la crisis?

R. Es un elemento necesario. Cuando se habla más de innovación e investigación nos sentimos satisfechos porque hemos hecho los deberes. Sería un error estratégico recortarla. Los Gobiernos deben centrase en apoyar el I+D industrial, que genera luego productos, y en el medio plazo, estabilidad y empleo. Además, es una barrera de entrada de terceros muy importante.

P. El año pasado adquirieron dos empresas. ¿Se plantean nuevas compras o tienen bastante con las inversiones de casa?

R. Siempre hay que analizar las oportunidades, y lo vamos a seguir haciendo. Igual que en las inversiones en nuevos desarrollos, no se pueden dejar pasar las oportunidades. Hay que hacer las cosas bien y adquirir compañías que tengan sinergias y un sentido estratégico con lo que tenemos. -