_
_
_
_
Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Jane Randolph, rostro del terror de los cuarenta

La actriz quedó encasillada en las películas de serie B

Gregorio Belinchón

Hace 60 años, el rostro de Jane Randolph era popular por todo Estados Unidos. Hace 50, sólo los aficionados a la serie B retenían su cara en su memoria. Su muerte, cuando se recuperaba de la operación de una cadera rota, el pasado 4 de mayo a los 93 años en su chalet en Gstaad, Suiza, en donde pasaba la mayor parte del tiempo -tenía otra casa en Los Ángeles-, ha desempolvado su nombre de las enciclopedias.

Nacida como Jane Roemer en 1915 en Youngstown (Ohio), Randolph creció en Indiana y, en 1939, dos años después de acabar el instituto, se mudó a Hollywood a probar fortuna. Estudió en la escuela de Max Reinhardt y tuvo suerte en una prueba con Warner en 1941.

Trabajando en este estudio apareció en pequeños papeles en un puñado de películas antes de firmar su contrato más serio, al año siguiente, con RKO, el estudio especializado en aquellos años en cine de terror y negro. Así consiguió su primer papel protagonista, Highways by night, antes de rodar su mejor trabajo, aunque como secundaria: La mujer pantera (1942). El filme de Jacques Tourneur es un hito en el cine de terror en el que Randolph interpretaba a Alice Moore. Los fans la recuerdan en la secuencia en la que está atrapada en una piscina cubierta por una criatura felina cuya fantasmagórica presencia está más sugerida que mostrada.

Hizo carrera como víctima vulnerable y de mujer fatal en filmes de serie B y noir. Randolph repitió personaje en la continuación, La maldición de la mujer pantera (1944), y durante los cuatro años siguientes rodó 15 películas, la mayor parte de ellas dentro de este género, a las órdenes de Otto Preminger, Edward Dmytryk, Anthony Mann e incluso, para televisión, y recién acabada la II Guerra Mundial, una versión de Primera plana. La leyenda asegura que ella fue una de las dos modelos que Walt Disney utilizó para el baile entre Bambi y Tambor en Bambi (1942).

Mientras rodaba Abbott y Costello contra los fantasmas en 1948 conoció a quien sería su marido, Jaime del Amo, y decidió retirarse. Juntos crearon un centro comercial, uno de los más grandes del mundo, Del Amo Shopping Center, en Torrance (California), y tuvieron una hija, Cristina, que ha sido la encargada de anunciar su fallecimiento.

Durante las siguientes décadas el matrimonio pasó la mayor parte de su tiempo en España. Por eso en 1955 apareció en un cameo en La princesa de Éboli, de Terence Young, con Olivia de Havilland de protagonista, y que se rodó en su mayor parte en territorio español.

Jane Randolph, en 1942.
Jane Randolph, en 1942.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Gregorio Belinchón
Es redactor de la sección de Cultura, especializado en cine. En el diario trabajó antes en Babelia, El Espectador y Tentaciones. Empezó en radios locales de Madrid, y ha colaborado en diversas publicaciones cinematográficas como Cinemanía o Academia. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster en Relaciones Internacionales.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_