Un sucesor forjado en casa
Una sucesión sin fecha, pero con heredero forjado en casa. Ferrovial anunció el miércoles su segundo proceso de recambio en su cúpula en la última década, con el nombramiento de Ínigo Meirás como director general del grupo constructor y de servicios y su designación como sucesor del consejero delegado desde hace 17 años, Joaquín Ayuso, que seguirá en el Consejo de Administración, aseguran que con "altas" responsabilidades.
En el anterior proceso de sucesión, a principios de la década, Rafael del Pino ascendió a la presidencia que había ocupado su padre, y Meirás, que lleva en la casa desde 1992, a consejero delegado de la entonces incipiente división de servicios.
Tras estos nueve años de diversificación y expansión internacional de las actividades de la añeja constructora, el pasado ejercicio los negocios de aeropuertos, servicios y autopistas aportaron el 86% del resultado de explotación. Meirás, nacido en Madrid en 1963, de origen gallego, tuvo mucho que ver ya en la primera aventura británica del grupo. Se hizo cargo de Amey en bancarrota, explican en Ferrovial, y consiguió darle la vuelta.
Meirás relevará a Ayuso como consejero delegado en unos meses
Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense y máster en Administración de Empresas por el Instituto de Empresa, Meirás ha tenido que lidiar en los dos últimos años con los aeropuertos británicos de BAA, en su calidad de consejero delegado de la división de aeropuertos del grupo español.
Dicen, para subrayar su apego a la realidad más concreta y cotidiana de la empresa, que conoce a los guardias de seguridad de Londres-Heathrow, la joya de la corona en las Islas Británicas. En la capital corre por los principales parques y por la City, su corazón financiero, durante sus frecuentes y obligadas estancias. Cuando puede, se apunta a carreras populares y maratones.
Quienes trabajan cerca de él destacan que se mete en los detalles del día a día, que es extraordinariamente pragmático, que está muy pegado al suelo y que se ha ganado el ascenso en un ambiente de meritocracia. Así lo destacó el propio Ayuso al señalar que la promoción de Meirás es por "méritos propios".
Él, por su parte, confiesa dos manías (la puntualidad y el orden) y una única afición: el Real Madrid. Pese a ello, y quizá por ese relativismo gallego que lleva en la sangre, espera que "este año la Champions la gane el Barcelona".
