El avión quemado del heredero del trono

Guillermo de Inglaterra, segundo en la línea de sucesión al trono de Isabel II, estuvo a punto de hacer añicos un avión de entrenamiento Tucano cuando pulsó el botón equivocado durante una sesión de instrucción. El incidente ocurrió el año pasado pero no se ha conocido hasta ahora, cuando ha sido revelado por un ingeniero retirado de la RAF, Joe Watt, que dirige la compañía encargada del mantenimiento de esos aviones.

Guillermo, que acabó consiguiendo sus galones de piloto de las fuerzas aéreas británicas tras 12 semanas de instrucción, pulsó el botón de encendido del motor cuando estaba procediendo al aterrizaje, lo que provocó un súbito y drástico aumento de la temperatura del motor. La caja negra del Tucano, un pequeño avión de turbopropulsión, reveló después que el motor se quemó porque llegó a alcanzar los 700 grados centígrados a pesar de que sólo admite una temperatura máxima de 650. Según Joe Watt, que en la actualidad es también concejal en representación del Partido Conservador, el príncipe "apretó el botón equivocado y coció el turbo". "No es el primero que lo hace. Hemos tenido otros dos o tres casos. Le ha pasado a pilotos mejores que él", añadió. Pese a ello, tanto la RAF como un portavoz del palacio de Buckingham explicaron que el avión sólo estuvo varios días fuera de servicio mientras era inspeccionado.

El principe, de 26 años, que al igual que su hermano Enrique ha querido seguir la carrera militar, fue protagonista de un extraño incidente con el tabloide dominical News of The World hace dos semanas. El diario publicó en su primera edición que el príncipe le había confiado a uno de sus reporteros, sin saber que estaba hablando con un periodista, su deseo de ser destinado a Afganistán, como lo fue durante unas semanas su hermano Enrique. La conversación, según el diario, se produjo en un club nocturno. Pero los portavoces de Clarence House lo desmintieron de inmediato y el diario retiró el reportaje en las siguientes ediciones.