Premio gordo en la Eurocopa

La Eurocopa es una de las competiciones de baloncesto que pasan más inadvertidas hasta que llega la Final a Ocho. El torneo levanta el vuelo en los cuatro días durante los que pone frente a frente a los ocho mejores, a los supervivientes de las largas y farragosas fases de clasificación. Eso será a partir de hoy, en Turín y con la participación de dos equipos españoles, el Pamesa de Valencia y el Iurbentia de Bilbao. El principal gancho de la Eurocopa es el premio para el vencedor: una plaza para la próxima edición de la Euroliga. Tanto para el Pamesa como para el Iurbentia es muy difícil alcanzar ese billete para la máxima competición continental a través de la Liga ACB, de manera que la oportunidad en Italia es inmejorable. Bien lo sabe el Pamesa, que ya ganó esta competición en 2003, aunque por entonces se denominaba Copa ULEB.

El equipo valenciano debutará mañana contra un rival de postín, el Khimki. El equipo moscovita cuenta con Jorge Garbajosa y Sergio Scariolo. El técnico fue acusado de recibir un trato de privilegio porque la federación española le hizo llegar informes sobre el Pamesa para su labor de seguimiento de los jugadores españoles en su faceta de seleccionador. La cosa no fue a más. Además de Garbajosa, el Khimki cuenta con Carlo Delfino, compañero cuyo la pasada temporada en los Raptors, y Milt Palacio, un base de Belice que también ha jugado en la NBA. El alero estadounidense nacionalizado ruso Kelly McCarty es una de las sensaciones del torneo y Scariolo cuenta con el ex madridista Lampe.

El Iurbentia se enfrenta también mañana al Zadar, que está sorprendiendo por su estupendo rendimiento en la Liga croata y que cuenta con Desmon Farmer, un escolta estadounidense que llegó a vestir los colores de los Sonics, los Spurs y el CAI Zaragoza, además de con varias de las mejores promesas del baloncesto croata.

El Dynamo de Moscú; el Hemofarm, serbio; el Benetton, italiano, y el Lietuvos, lituano abren hoy la competición.