El Villarreal no cobrará el abono a los socios en paro

Reconocido internacionalmente por su modélica gestión deportiva y económica, el Villarreal va a poner en marcha una medida, pionera y revolucionaria, acorde a los tiempos de crisis que corren. El club castellonense no cobrará el abono de la temporada que viene a los socios que se encuentren en paro sin perder por ello los privilegios y derechos adquiridos por ser seguidor amarillo. Así lo anunció ayer Fernando Roig, el propietario del club, en una rueda de prensa convocada expresamente para anunciar el paquete de medidas sociales adoptadas. "La idea es pensar en esa masa que tiene la desgracia de haberse quedado sin trabajo para que puedan seguir viniendo a ver el fútbol a El Madrigal", explicó Roig, que informó de la congelación del precio de los abonos para los demás socios en la próxima campaña.

El gesto del Villarreal no supone una medida populista. En los últimos años, la base de la economía de la provincia de Castellón estaba centrada en la construcción y la producción de azulejos. La comarca de La Plana polariza el 90% de la producción cerámica de España, el segundo país, tras Italia, que más exportaciones realiza de ese producto y sus derivados. La crisis se ha focalizado duramente en Vila-real y las poblaciones limítrofes, cuyo desempleo es el que más ha crecido en España en el último año, un 113%, y elevado la tasa de parados hasta un 11,30% tras años de bonanza y pleno empleo.

Paga quien más tiene

Roig pretende que el Villarreal no vea mermado el apoyo y la masa social que tiene en estos momentos y que tanto le ha costado alcanzar. Más de la mitad de los 20.000 socios con que cuenta la entidad castellonense son de la población de Vila-real, que asciende a 50.000 habitantes. Tampoco pretende el presidente del Villarreal que el club que dirige vea menguados sus ingresos. Para que no suceda tendrán que pagar los que más tienen. "Entre todos los que formamos parte del club, como directiva, cuerpo técnico, jugadores y patrocinadores, debemos colaborar en un fondo común para compensar lo de aquéllos que se han quedado sin empleo", explicó Roig.

La difícil situación económica no es ajena al fútbol. Semanas atrás, ya pronosticó Roig que los clubes que no asuman la situación lo van a pasar mal. En el equilibrio financiero radica la estabilidad deportiva: "Nuestra política va a ser la de siempre: no gastar más de lo que ingresamos".