Los socialistas advierten de que no gobernarán "a cualquier precio"

Touriño subió ayer la apuesta. A una semana de las elecciones, el candidato socialista cambió su discurso y pidió en Noia el apoyo de los gallegos para gobernar "sin ataduras". Desde ayer, el PSdeG persigue el sueño de un Gobierno en solitario, sin ayuda del Bloque, y aunque no mencionó a su socio de Gobierno, los casi 400 seguidores presentes en el Teatro Noela sabían que hablaba de los nacionalistas.

Las encuestas, casi unánimemente favorables a los intereses del bipartito, sirvieron a Emilio Pérez Touriño de punto de partida para lanzar un mensaje a los indecisos y específicamente a los votantes socialistas más descontentos con la política de Quintana. Lo hizo en Noia por la mañana y lo repitió en Monforte de Lemos por la tarde. Aunque los sondeos afirman que el PP "no va a tener el apoyo de la mayoría" y que el PSdeG está "en condiciones de ganar estas elecciones", a Touriño no le basta. "No me conformo con ser presidente, quiero tener más fuerza, quiero todo vuestro apoyo, tener la mayoría de este país para que Galicia avance en libertad y sin imposiciones". "Quiero ser un presidente sin ataduras, con toda autonomía", aseguró en medio de los aplausos del respetable. "Os pido vuestro coraje; os pido una mayoría para construir el proyecto soñado que iniciamos hace cuatro años".

"No me conformo con ser presidente, quiero la mayoría para avanzar"

Y para pelear por esa mayoría, Touriño volvió a pedir el voto de las mujeres, de los jóvenes y de los trabajadores. "Apelo a un apoyo masivo en las urnas para avanzar y construir un país de futuro; os pido que acudáis a votar masivamenente para sumarnos a una obra colectiva y seguir modernizando este país. Os pido toda vuestra ayuda; la necesito", clamó el socialista.

Y para que no cupiera ninguna duda de lo que estaba diciendo, Touriño prometió un compromiso a cambio del apoyo mayoritario de los gallegos. "Hoy quiero establecer las reglas de ese compromiso", aseguró. Y la primera de ellas, aunque no quiere "renunciar a la mayoría, porque es posible soñar con ella", es muy clara: "No gobernaré a cualquier precio. La transparencia y la honestidad son innegociables; la igualdad de oportunidades y los derechos de los ciudadanos son irrenunciables".

Tampoco pasará, enumeró, "por el aro de la imposición lingüística, porque las lenguas no se imponen ni se prohíben, son instrumentos de unidad. Siempre estaré comprometido con la normalización del gallego y con el respeto al castellano" en el marco de "una Galicia en la que no haya una guerra de idiomas". Y no pasará "por el aro de una educación doctrinaria de uno o de otro signo; tiene que ser una educación en libertad". "Quiero una Galicia de ciudadanos libres y responsables" y por eso, insistió, no gobernará "a cualquier precio". "Mi precio es alto, se llama Galicia y nada más que Galicia. Quiero ser el presidente de todos y si no, no seré presidente de la Xunta de Galicia", advirtió, "tenéis mi palabra". "Por eso os pido todo el apoyo; no os quedéis en casa, eso es igual que votar al PP".

El cambio de discurso de Touriño se hizo también evidente a la hora de hablar de su principal adversario, Alberto Núñez Feijóo, al que sí menciona con nombre y apellidos. "Estamos en carnaval, es tiempo de disfraces y me viene a la cabeza el travestismo político del candidato del PP, que no quiso ir al debate de TVG y ahora dice que la culpa es mía. El PP", acusó, "siempre tiene a alguien a quien echar la culpa". Feijóo, insistió Touriño, "anda medio disfrazado de 009, de James Bond, pero el mejor disfraz era de El Fugitivo, porque anda escapado".

"Dice que van a empezar", ironizó en referencia al lema de los populares. "Y de empezar nada. Lo que quieren es volver, volver y volver". "Ya no se acuerda de que fue vicepresidente y conselleiro de Manuel Fraga", prosiguió, "y quiere volver a la Galicia de antes, de la resignación". Las intenciones del PP se resumen bien, ironizó, con el lema de José Luis Baltar en Ourense: "Si no eres del PP, jodeté, jodeté", una frase que sintetiza a la perfección, aseguró Touriño, la voluntad de exclusión de los conservadores.

El presidente no obvió la presencia de un grupo de manifestantes a la entrada del mitin de Noia que protestaba por el trazado de la variante de la localidad, un viejo conflicto que se remonta años atrás. "Estan ahí y los entiendo; en las municipales también estaban. No pararemos hasta explicárselo uno a uno, porque estamos defendiendo el interés del país y no de cuatro".

El discurso en el PSdeG, en la recta final de la campaña, toma definitivamente un nuevo rumbo. Ahora, como aseguró con toda claridad en Monforte el conselleiro de Traballo, Ricardo Varela, se trata de sumar más votos para que haya "más socialismo en el Gobierno".