El 'soccer' ya no seduce al Barça

El Barcelona se plantea descartar su entrada en la Major Soccer League (MLS), la Liga de fútbol norteamericana, a través de una franquicia en Miami. El director general del club, Joan Olivé, reveló ayer que están "haciendo números" para "evaluar con mucho cuidado si el modelo previsto se aguanta". "La situación económica de Estados Unidos es muy delicada y siempre hemos dicho que optaríamos a la franquicia si no tiene riesgo financiero ni para la imagen del club", argumentó.

Al Barça no iba a costarle ni un duro, al aliarse con el empresario boliviano Marcelo Claure y lograr inversores y patrocinadores, pero conseguirlos en tiempos de crisis es mucho más complicado, según señaló Olivé. ¿Habrá o no equipo? "La probabilidad de que no se haga es ahora más alta que antes", zanjó el director general.

Pese a la virulencia de la crisis, los números del club esta temporada son -de momento y a diferencia del año pasado- un fiel reflejo de la vitalidad del equipo en el campo, en el ecuador del ejercicio económico. Entre junio y diciembre de 2008, el Barcelona ingresó 186,5 millones de euros (un 12,5% más que en el mismo semestre del ejercicio anterior) y logró un beneficio neto de 16 millones de euros (un 28,2% más). El vicepresidente económico, Joan Boix, subrayó "el envidiable equilibrio entre las partidas de ingresos por entradas, medios de comunicación y mercadotecnia", y la capacidad del club para generar recursos.

El flujo de caja, que es el beneficio más las amortizaciones, superó los 47 millones de euros. Es dinero para futuras inversiones. De hecho, en medio curso, la caja generada por el Barça ha superado la inversión neta que llevó a cabo el pasado verano para esta temporada (medida por la diferencia entre los ingresos por los jugadores que han dejado el club y los gastos de los nuevos fichajes).

El club, pese a todo, mantiene una deuda de 180 millones de euros (diez menos que hace un año). La escasa afluencia de público al Camp Nou -ha ingresado 1,4 millones menos- y la crisis financiera han obligado al club a buscar nuevas fórmulas de ingresos, como el reciente acuerdo de patrocinio con Etisalat y un nuevo contrato con Nike tras encontrar otra fórmula de reparto de los ingresos procedentes de las ventas: el Barça se llevará una mayor tajada.