El plan de reactivación llega con lentitud

Los mercados de valores abrieron esta última sesión con una vuelta a las posiciones prudentes, aunque también se hablaba de desconfianza, ante el retraso en la aprobación del plan de reactivación económica en Estados Unidos.

Los inversores se desesperan ante la parsimonia con que se discute la aprobación del plan y su cuantía final, aunque ayer no había datos macroeconómicos que pusieran una nota de urgencia en al ambiente.

El Ibex 35 se mantuvo durante casi toda la sesión a la baja ante la total ausencia de novedades y de datos, pero la tranquilidad que disfrutó la Bolsa de Nueva York en su apertura consiguió cambiar la orientación. Al cierre de la sesión el Ibex 35 subía el 0,47% para quedar en 8.584,80 puntos, aunque minutos antes conseguía superar el listón de los 8.600 puntos. Los valores medianos del mercado ganaron el 0,13% y los pequeños cedieron el 0,26%.

El conjunto de las plazas europeas se dejó llevar por esa prudencia, o desconfianza, que imponía la lentitud con que se desarrollan los acontecimientos y en todas ellas el ritmo de la contratación era similar.

En el caso del Mercado Continuo se produjo un notable descenso de la actividad, con un total de 2.271,53 millones de euros, de los que tan sólo 1.642,59 millones procedían de las operaciones del "mercado abierto", que son las que fijan los precios. Los cuatro grandes valores del mercado, que impusieron un frenazo importante en los minutos finales de la jornada, acapararon el 60% del dinero de esas operaciones y aún así, había quien afirmaba que estaban operando "al ralentí" ante la falta de presión de compradores y vendedores.

Las llamadas de atención de algunos profesionales sobre el impacto que puede tener sobre el mercado español el posible descenso de los dividendos con cargo a este ejercicio y el próximo, también estaban detrás de ese descenso del negocio, aunque en general se considera que "casi todo está descontado" por el actual nivel de las cotizaciones.

A falta de otras cuestiones de interés, hubo tiempo para comentar los bandazos del precio del petróleo de las últimas semanas, aunque parece que en este momento su influencia sobre la evolución de los precios al consumo ha perdido algunos enteros ante el evidente descenso de la demanda en todo el mundo.