Rossi despierta al Villarreal
El italiano acaba con un Numancia respondón
Los momentos de calidad del Villarreal son más productivos que los de la mayoría de sus rivales. Por ello, con poco le alcanza para estar arriba en la tabla. Todo resulta más sencillo con un delantero como Rossi, menudo, habilidoso, escurridizo, goleador. El italiano despertó a un Villarreal que pasa inquietantes momentos de sesteo que le han costado puntos y creado dudas. Rossi resulta vital en el Villarreal.
Sorprendió Pellegrini dejando sentado a Cazorla en el banquillo, al igual que a Pirès. Un toque de atención, un aviso para navegantes o, simplemente, una cuestión táctica, lo cierto es que el preparador chileno buscó revitalizar a un equipo con más alma que juego. No le quedó más remedio al técnico chileno que recurrir a Cazorla y Pirès en el segundo acto, cuando el conjunto castellonense se encontraba perdido en su juego. Mano de santo. Recuperado Rossi, el Villarreal volvía a contar con su jugador más desequilibrante.
VILLARREAL 2 - NUMANCIA 1
Villarreal: Diego López; Ángel, Gonzalo, Godín, Capdevila; Cani, Eguren (Cazorla, m. 64), Senna, Ibagaza (Pirès, m. 64); Rossi (Bruno, m. 86) y Llorente. No utilizados: Viera; Venta, Fuentes y Mati Fernández.
Numancia: Juan Pablo; Juanra, Raúl Bravo, Boris, Cisma; Del Pino (Mario, m. 75), Palacios, Dimas, Barkero (Bellvis, m. 73); Aranda y Brit (Quero, m. 85). No utilizados: Kellemen; Ortega, Juan Carlos Moreno y Felipe Guréndez.
Goles: 1-0. M. 16. Rossi. 1-1. M. 39. Aranda. 2-1. M. 66. Rossi.
Árbitro: Fernández Borbalán. Amonestó a Eguren, Godín, Gonzalo, Boris, Llorente y Raúl Bravo.
17.000 espectadores en El Madrigal.
Con el mismo poso de falsa solvencia, con un ritmo pausado, exasperante en ocasiones, el cuadro castellonense supo llevar el partido a su terreno y llegó el primer gol de Rossi. Se creyó entonces el Villarreal con todo hecho ante un Numancia que nunca se esconde. Su atrevimiento resulta tan loable como en ocasiones temerario. Fuera de su ambiente resulta vulnerable. El orden no le llega para defenderse con sobriedad. En el ataque no anda sobrado de argumentos y efectividad. Sin embargo, lo intenta una y otra vez. En uno de tantos letargos del Villarreal, el Numancia igualó con el gol de Aranda ante la salida de Diego López.
Aturdido quedó el Villarreal. Hasta que aparecieron en escena los buenos y a Rossi le volvió la inspiración.
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