Un paquidermo con alma de metal

Es posible seguir a un elefante que camina por las calles mientras gime, ruge y ducha con agua expulsada por su trompa a niños y viandantes atónitos y fascinados? ¿Seguir a una marioneta gigante movida por una grúa? En Nantes sí. La ciudad se reinventa y en ocasiones parece un inmenso teatro repleto de espectáculos. No en vano es la ciudad natal de Julio Verne, y algo de ingenio, de delirio, de imaginación desbordante tenía que heredar. De su pasado industrial más reciente apenas queda nada. Pero en lugar de caer en una especie de lamentación postraumática, como les ha sucedido a otras ciudades, parece renacer y estar muy firmemente decidida a transformarse en un centro cultural de referencia en toda Europa. El ejemplo más significativo de ese nuevo espíritu es la isla de Nantes, un terreno antiguamente ocupado por astilleros donde hoy se desarrolla, entre otros proyectos, la Galería de Máquinas: un espacio donde los sueños de Verne se hacen realidad y se materializan en animales mecánicos de dimensiones imposibles. El gran elefante es la estrella, y en breve llegarán otros ingenios nacidos en el seno de un amplio proyecto tras el cual está la compañía teatral Royal de Luxe.

9.00 'Crème' y cruasán

En Nantes llueve a mares, literalmente. Y por ello es clave elegir la época del año adecuada. Con buen tiempo, las alternativas en la ciudad se multiplican. Lo más recomendable es empezar por el ritual de un buen desayuno: un crème (café con leche en Francia) bien caliente, cruasán y periódico en alguno de los cafés de la Place Marc Elder (1), donde se encuentra el castillo de los duques de Bretaña (2). La antigua residencia de Ana de Bretaña acoge el museo de historia de la ciudad (4, Place Marc Elder. 0033 811 46 46 44; www.chateau-nantes.fr. Abre de 10.00 a 18.00. Entrada, 5 euros), pero con la particularidad de acercar historia y conciencia histórica a sus visitantes. Varias de sus salas están dedicadas al pasado esclavista de Nantes, durante la llamada época del comercio triangular entre su antiguo puerto, África y América. Cerca del castillo se encuentra el Passage Pommeraye (3), una galería comercial con solera muy útil para retomar el contacto con el presente, y a un paso del centro histórico, de la catedral de Saint Paul y del dédalo de calles antiguas y estrechas que han sobrevivido a los avatares de la ciudad.

11.00 De isla en isla

A un paso del centro se encuentra la Île Feydeau (4), un barrio construido entre 1740 y 1780 sobre una isla del río, hoy desaparecida (el antiguo cauce ha sido urbanizado). La riqueza generada por el comercio triangular animó a los empresarios de la época a levantarlo y decorarlo con fachadas blancas, patios, blasones y figuras, que cuentan su historia. El tiempo ha combado y torcido los edificios. Se hunden lentamente en el inestable subsuelo fluvial, pero esa asimetría le da el carácter de un ser vivo. La oficina de turismo (3, Cours Olivier de Clisson; de 10.00 a 18.00. 0033 892 46 40 44) organiza visitas guiadas muy detalladas. Tomando la línea 1 del tranvía y llegando hasta la parada Chantiers Navals se alcanza la isla de Nantes (5), un espacio reconquistado por la ciudad una vez cerrados los astilleros, almacenes e industrias que lo ocupaban. Aquí está la Galería de Máquinas (6) (Boulevard Léon Bureau, s/n. 0033 08 10 12 12 25; www.lesmachines-nantes.fr. De miércoles a viernes, de 14.00 a 18.00. También sábados y domingos, hasta las 19.00. A partir de abril, abre sus puertas desde las 10.00 y también funciona los martes), un proyecto de François Delarozière y Pierre Oréfice, ambos vinculados a Royal de Luxe. La estrella es el gran elefante con propulsión hidráulica de 12 metros de alto y 40 toneladas de peso, con capacidad de transportar sobre sus espaldas a más de 30 personas. Un magnífico paquidermo que realiza paseos de hora y media (el elefante realiza las salidas a las 14.45, 15.30, 16.15, 17.00 y 17.45). Pero en la galería existen más criaturas móviles de propulsión humana que representan el universo onírico de Julio Verne. Otros proyectos en construcción son un tiovivo poblado de seres submarinos, bautizado con el nombre de Mundos Marinos, y el gigantesco Árbol de las Garzas, auténtica catedral de acero de 800 toneladas de peso, del que ya existe una primera rama.

13.00 El barrio del mar

Nantes tiene un sabor marino innegable. Muy cerca de la isla y comunicado por un navibus (www.tan.fr) está el barrio de Trentemoult (7), un lugar perfecto para tomarse un respiro y comer algo. La Civelle (21, Quai Marcel Boissard. 0033 240 75 46 60; www.la-civelle.com) es un restaurante con vistas al Loira, especializado en pescado y marisco, con un ambiente relajado, amable y unos postres deliciosos. De vuelta a Nantes, y si uno visita la ciudad entre el 6 de junio y el 23 de agosto de este año, podrá asistir a la Bienal de Arte Contemporáneo Estuaire 2009 (8) (www.estuaire.info). La particularidad de esta feria del arte moderno es que utiliza el espacio urbano, el entorno natural del Loira y el paisaje industrial de Saint Nazaire para interactuar con el público a través de obras, instalaciones, espectáculos y performance. Un barco - I recorre el tramo del río entre ambas ciudades para contemplar las distintas instalaciones. En la última edición se pudieron ver intervenciones urbanas de Felice Varini en el puerto de Saint Nazaire, La Maison dans la Loire, una casa semihundida en mitad del río, de Jean-Luc Courcoult, o Miscoincevable, de Erwin Wurm, la instalación de un velero doblado literalmente sobre la pared de una esclusa.

16.00 La casa mágica

En el número 3 de la Rue D'Hermitage, en una casa burguesa del siglo XIX, se encuentra el Museo Julio Verne (10) (0033 02 40 69 72 52; www.nantes.fr/julesverne. Abre de miércoles a sábado, de 10.00 a 12.00 y de 14.00 a 18.00. Los domingos abre por las tardes. Entrada, 3 euros), un espacio dedicado en exclusiva a la ingente producción del escritor que recoge manuscritos, modelos u objetos, y con un espacio multimedia que actualiza en todo su esplendor su obra.

18.00 Un lugar único

De vuelta en pleno centro urbano, sería imperdonable perderse el Lieu Unique (11) (2, Rue de la Biscuiterie. www.lelieuunique.com; 0033 02 51 82 15 00 / 0033 02 40 12 14 34), espacio cultural, bar y restaurante que ocupa la antigua fábrica de las famosas galletas LU. Librería, sala de exposiciones, espacio de creación y una de las sedes de la bienal Estuaire. Es un lugar inagotable de ambiente relajado y divertido donde acude lo más top de Nantes.

20.00 Diversión nocturna

Realizamos una última parada nocturna en el Hangar à Bananes (12), un antiguo almacén de plátanos, hoy reconvertido en zona de salida nocturna repleto de cabarés, clubes y restaurantes. Para encontrarlo no hay más que localizar la gigantesca grúa Titán (13), visible desde toda la ciudad, o la instalación Los Anillos (14), de Daniel Buren, un nuevo icono de Nantes. Para obtener más información: www.paysdelaloire.es y www.nantes-tourisme.com.

Nantes, la Venecia del oeste