47 puntos y un récord de leyenda

El reluciente Barcelona sigue batiendo récords allí por donde va. Con la de ayer ya son ocho las victorias consecutivas que ha cosechado a domicilio en la Liga -13 en total- por el equipo de Guardiola cuando todavía falta una jornada para acabar la primera vuelta. Gracias al zapatazo de Messi, son ya 24 puntos los conseguidos fuera del Camp Nou y 47 los puntos con los que comanda, intratable, el torneo. Un punto más que el equipo que dirigía Frank Rijkaard en la temporada 2004- 2005 a estas alturas de la temporada. Sin embargo, el Barça no sólo se supera a sí mismo, sino que supera el récord absoluto en el campeonato de Liga, en poder del Madrid de la temporada 1960-1961. Aquél equipo entrenado por Miguel Muñoz logró siete victorias consecutivas a domicilio entre la 12ª y la 24ª jornada del campeonato.

No sólo los puntos convierten al Barcelona en el dominador de la competición, también el oficio de sus jugadores. Y en particular el de uno de ellos: Messi. Suma ya 11 goles en la Liga y 7 asistencias. Y Eto'o, con 16, camina con paso firme hacia el trofeo de máximo goleador. Con los zarpazos de ambos delanteros se deshace la igualdad existente entre los dos equipos, empatados hasta hoy en victorias, empates y derrotas en los últimos 30 enfrentamientos. Desaparece también el maleficio de los de Guardiola con el Reyno de Navarra, estadio en el que había cosechado sólo dos de los nueve puntos disputados en él durante las tres últimas campañas. Fue con un gol de Eto'o en la temporada 2004-2005 la última vez que el Barça consiguió los tres puntos en el estadio navarro. El equipo de Guardiola no encuentra límite ni en la propia historia del fútbol.