“Vendo todas las motos que puedo”
Pregunta. ¿Cómo se han portado los Reyes?
Respuesta. Pues, francamente bien.
P. Será porque es usted amigo de su hijo.
R. [Carcajada]. No me encuentro entre los amigos. Sí entre los conocidos y admiradores de don Felipe. Eso es verdad.
P. Estoy asustada: sus competencias ocupan 10 folios. ¿Es tan competente?
R. Yo creo que más o menos soy competente. Aseao.
P. ¿Y da para todo?
R. Lo intento, aunque es imposible. Y no creo que nunca más en la historia de la Comunidad de Madrid se dé una situación como la mía.
P. Igual se apaña porque, como es sabido, Ignacio González le mete la cuchara en todo.
R. El vicepresidente es coordinador del Gobierno y portavoz, y es lógico que entre en todos los temas.
P. Hay un concurso de vídeos llamado Come con Rajoy. ¿Se presentaría?
R. Yo es que he comido muchas veces con Rajoy. Y no me hace ilusión.
P. La formación del Cuerpo de Bomberos es cosa suya. ¿Qué le parece más sexy: la manguera o el casco?
R. El casco. Tiene una cierta fortaleza, es brillante, puede uno ocultar los ojos y es muy sensual. Tiene su espejito, y te puedes reflejar, como en estos techos encima de las camas.
P. Veo que lleva el casco más allá del bombero.
R. Siendo secretario general del PP en Madrid, hay que llevar el casco puesto todo el día.
P. Hablando de sexy. ¿La presidenta, con o sin calcetines?
R. A mí la presidenta me gusta de todas las maneras. Pero la prefiero sin calcetines.
P. Es analista financiero especializado en eléctricas. ¿Aguirre da calambre?
R. Esperanza da calambre siempre. Siempre está a la máxima tensión.
P. ¿Y va a la red o a pilas?
R. Yo creo que a la red, al máximo. Da todo en la pista.
P. Su salto a la fama fue el Tamayazo. ¿Cabe pensar que sin tránsfugas no sería usted nadie?
R. Bueno, probablemente yo seguiría siendo alcalde de Valdemoro. Ser uno alcalde de su pueblo es lo más grande, sin duda.
P. ¿Cómo se puede ser tan de derechas con un padre agricultor?
R. Con un padre agricultor que trabajó desde los 14 años, y yo trabajando en el campo desde los 15 hasta que acabé la carrera. Yo no me considero muy de derechas. Yo me considero liberal.
P. Pastorea el PP, con lo poco que le gusta el partido. ¿Sufre?
R. El partido es lo más duro y, a veces, lo más ingrato. Es verdad que no me atraía excesivamente, pero el contacto con mis compañeros está siendo lo más gratificante.
P. ¿Ignacio González o Rajoy?
R. ¿En general? Sin duda, prefiero a Ignacio González.
P. ¿Y González o Gallardón?
R. Ignacio González. Tengo más relación personal, de amistad y profesional que con Rajoy o con Alberto.
P. Lo de amistad con él se lo dirá a todas.
R. No. Lo que pasa es que el roce hace el cariño.
P. Usted antes era más de Gallardón. ¿Qué bolero le cantó al oído la presidenta?
R. A mí me gustan poco las etiquetas. No soy ni de Gallardón ni de Esperanza. Doy lealtad a quien me ha nombrado. Y todo lo que me cuenta Esperanza al oído me suena bien: bajada de impuestos, liberalización, austeridad... Ésos son los boleros de los que hablamos. De los otros, con Esperanza, pues hombre, no.
P. Puesto a jubilarse de la política, ¿mejor FAES o el Caribe?
R. El Caribe, claro. Pero, si me fuera de la política, volvería al banco. Tengo una excedencia.
P. Pues ahora en un banco igual no vendía una escoba.
R. Bueno, bueno. Yo he vendido mucho en muy malas circunstancias. Llevo toda la vida vendiendo.
P. ¿Motos?
R. Intento vender todas las motos que puedo.
P. Frecuenta al Principito. ¿En su planeta usted va de rosa, de cordero o de serpiente?
R. Yo al Príncipe, las veces que hablo con él, siempre le digo lo que pienso. No voy de nada. Voy de Paco.
P. ¿Quién suele pagar las copas?
R. No necesariamente yo.
P. ¿Hay algo superior a ser de Valdemoro y del Atleti a la vez?
R. Bueno, yo aparte de esas dos cosas soy antimadridista. No sé si eso es superior.
P. ¿Sigue pensando que el mejor lema en política es: "Al cabrón, perdigón"?
R. Es un dicho de mi pueblo. No como norma general, pero a veces es necesario aplicar ese lema.
PERFIL
Con 44 años y dos hijas, le gusta insistir en que es de pueblo y le va el campo, y en que, de niño, jugaba a "cosas baratas": canicas, chapas, peón. Toca la bandurria, lleva a Shakira en el móvil, baila poco y "todo igual, con paso gorrinero", y se ha apuntado a un gimnasio en Chueca. Se cree "bastante aburrido". Cuando canta las excelencias de su relación con el vicepresidente madrileño le crece inmensamente la nariz.
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