"No tengo ni fecha de juicio ni petición fiscal"
La mayoría de los internos de Madrid V están en la cárcel como medida preventiva. La estancia máxima en prisión como medida cautelar es de dos años, prorrogable por otros dos. "No tengo ni fecha de juicio ni petición fiscal" es una de las frases más repetidas entre las mulas de Soto del Real, que no tienen arraigo en España y son consideradas por ello como delincuentes con mayor riesgo de fuga. Permanecen 8, 10, 15 o 20 meses a la espera de un juicio que se demora indefinidamente.
"Llevo 26 meses de prisión preventiva", cuenta Lidia, una de estas mulas, boliviana, de 28 años. Todavía no sabe cuántos años le pueden caer, pero espera que, como mucho, seis. "Espero poder pasar la próxima Navidad en casa", añade otra, más optimista.
"Nos utilizan para transportar cocaína", añade otro interno, también detenido por tráfico de drogas en Barajas. Él ya tiene sentencia: nueve años y un día. "Nos tienen aquí 20 meses, esperando. La justicia va muy lenta. Muchas veces para cuando quieres tener el juicio ya has cumplido un cuarto de lo que será la condena y deberías poder solicitar permiso, pero no", explica. Para que un interno disfrute de un permiso de salida es necesario que haya extinguido la cuarta parte de la condena, que se encuentre en segundo o tercer grado y que no presente mala conducta.
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