El fallecimiento de una mujer eleva a cinco el número de muertes en Gavà

Continúa el goteo de muertos por la explosión de gas ocurrida en la localidad barcelonesa de Gavà la madrugada del pasado día 3. A mediodía de ayer falleció Antonia F. E., de 40 años, que estaba ingresada en la unidad de grandes quemados del hospital del Vall d'Hebron y tenía afectado el 90% del cuerpo. Es la quinta víctima mortal.

El fallecimiento se produjo a las 12.50, minutos antes de que se iniciara el funeral por otras tres víctimas: los hermanos Torcuato y Francisco F. F., de 41 y 20 años, respectivamente, y Fátima C. F., de 17, que eran hijos y nieta de la primera fallecida, Ana Maria F. F., de 60 años. La quinta víctima, la mujer que falleció ayer, era nuera de Ana María y esposa de Torcuato.

El funeral fue oficiado por Germán Agustí, diácono de la parroquia de Ca n'Espinós y presidente de la asociación de vecinos de ese barrio, en el que se produjo la explosión. "Sobran las palabras para expresar el tremendo sentimiento de dolor que estamos sufriendo", afirmó en su homilía, en medio del escrupuloso silencio de los más de 300 asistentes y que sólo troncó el llanto de algún familiar. Probablemente por la sensación de dolor que invadía el oratorio del tanatorio de la Ronda de Dalt, el diácono disculpó a los asistentes de levantarse de sus asientos en diferentes momentos del oficio.

El funeral estuvo presidido por el alcalde de Gavà, Joaquim Balsera, y por el consejero de Interior de la Generalitat, Joan Saura. También asistió el regidor de la localidad granadina de Benalúa de Guadix, Juan Hidalgo, de donde procedían todos los fallecidos. Desde ese lugar llegó el viernes un autocar de vecinos y familiares para despedir a las víctimas; ayer mismo regresaron a Benalúa.

Como ya ocurrió el sábado en el primer entierro, los tres féretros fueron conducidos al cementerio de Gavà para recibir sepultura escoltados por la Guardia Urbana de Barcelona. A los tres coches fúnebres siguieron tres autocares fletados por las instituciones catalanas para facilitar el desplazamiento de familiares y amigos desde el tanatorio.

Los familiares han trasladado su gratitud por el trato que están recibiendo estos días de las instituciones y por la coordinación con la que están actuando para hacerles más llevaderos estos momentos. El Ayuntamiento de Gavà hizo ayer un llamamiento a los ciudadanos para que respondan a la llamada del Banco de Sangre y de Tejidos y acudan en la mañana de hoy a realizar una donación frente al Ayuntamiento de esta localidad.

17 de las 28 personas afectadas por la deflagración continúan hospitalizadas. Siete de los pacientes son menores. Uno de ellos ha entrado en estado crítico y los otros 16 continúan estables dentro de su pronóstico, que es grave para cinco y muy grave para 11 personas.