A solas en el Calderón
El Atlético busca sellar su pase a octavos a puerta vacía ante un PSV en horas bajas
"¿Jugarnos el pase a octavos en Marsella? Eso sí que es una pesadilla, y no recibir al PSV a puerta cerrada". Igualado a ocho puntos con el Liverpool en lo alto del Grupo D y con un colchón de cinco sobre el cuadro holandés y el Marsella, el Atlético afronta la visita del conjunto de Huub Stevens "obligado a ganar", según recalcan sus directivos, "un tanto cansados del conflicto con la UEFA". "Evidentemente, vamos a extrañar a la afición. Tendremos que esforzarnos el doble para brindarle la victoria, ya que es la verdadera sacrificada de todo esto", observó Javier Aguirre, al que sustituirá en el banquillo su segundo, Nacho Ambriz, como ya hizo en Anfield.
El técnico mexicano cumplirá el segundo partido de sanción que le impuso la UEFA por sus insultos a Valbuena, delantero del Marsella, el pasado 1 de octubre. El organismo que preside el francés Michel Platini castigó entonces con tres partidos al Atlético por "la actitud deproporcionada" de la policía y "los gritos racistas" que sufrieron los futbolistas negros visitantes. Tras muchos vaivenes, el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) redujo la pena a un único partido sin aforo. "Lo importante es que el fútbol se imponga a todo este lío", reclama Maniche. "Estamos solos ante el peligro. Probablemente sea el partido más importante de la temporada y es una lástima que sea sin nuestro público, pero hay que superar la prueba para acudir tranquilos a la última jornada de la liguilla. Hay que clasificarse ya. No podemos ir a Marsella necesitados", resume un mandatario.
"Hay que clasificarse ya. No podemos ir a Marsella necesitados", advierte un directivo
Tan sólo 75 personas de cada entidad, incluyendo al cuerpo técnico y los jugadores, tendrán acceso al estadio Calderón, aparte de los periodistas acreditados. La UEFA también ha rebajado la vigilancia: si ante el Liverpool envió a dos responsables de seguridad, los escoceses Kenneth Scott y Robin Howe, en la visita del PSV se bastará el alemán Michael Kuchenbeker. "Aun así, no queremos problemas. Por eso no hemos instalado pantallas fuera del campo como nos reclamaban las peñas", apuntan desde el club. "Jugar sin gente es el peor castigo que le pueden poner a un futbolista", asiente Perea, autor del penalti que propició el empate del Numancia en el minuto 94. Seitaridis suplirá en el lateral derecho al defensa colombiano mientras que Raúl García hará lo propio con Assunção en el pivote. Consciente del caminar errante del equipo en la Liga, en la que sólo ha ganado dos de los últimos ocho duelos, Aguirre se aferra a la Champions: "Estamos mentalizados. El vestuario ve la clasificación en la mano".
Enfrente estará un PSV en horas bajas como ya se vio en el meneo que recibió en Eindhoven. Quinto en la Eredivisie, descolgado a cinco puntos del AZ Alkmaar, el cuadro de Stevens apenas tiene dinamita lejos del Phillips Stadion: seis derrotas de ocho posibles. "No son lo que eran. Tienen menos calidad que otros años", resume Heitinga.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.