Carod llama a refundar Esquerra Republicana y pone su futuro a disposición del partido

Más pronto que tarde Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) debe decidir qué candidato presenta a las elecciones autonómicas previstas para 2010. El presidente, Joan Puigcercós, se disputa el cartel electoral con su antecesor en el cargo, Josep Lluís Carod Rovira, y ambos mantienen un nuevo tira y afloja de complicada resolución. Aunque Carod reiteró hace apenas una semana su voluntad de ser candidato, ayer, en una conferencia con militantes del barrio de Gràcia, lo dejó todo en el aire. "Me pongo en primera línea de compromiso para lo que mi partido quiera de mí", dijo.

Estas palabras, pronunciadas al final del discurso y sin aclaraciones posteriores por parte del interesado, provocaron gran revuelo entre los asistentes a la conferencia, todos ellos militantes de base y cargos del Gobierno próximos al consejero. Uno de sus colaboradores más directos negó que se trate de una renuncia, pero sí aclaró que Carod rechaza "participar de una ceremonia que aumente la división interna", como podrían serlo unas primarias para elegir candidato. Carod, pues, no estaría lanzando un mensaje de rendición, sino de retirada pactada, algo que beneficiaría al partido y muy posiblemente a él mismo. Retirarse sin romper la cristalería le permitiría mantenerse en el Gobierno -"en primera línea", como él dice-, máxime cuando los estatutos de ERC impiden que los dirigentes del partido estén también en el Ejecutivo. Desde el último congreso, Carod ya no es dirigente de ERC.

Otros colaboradores del consejero daban por hecha la retirada. "Carod se sabe amortizado y no pretende enfrentarse a Puigcercós, aunque quiere seguir siendo la cara de ERC visible en el Gobierno", dijo. El entorno de Joan Puigcercós, que no acudió a la conferencia, se mantuvo anoche en silencio.

Antes de de ponerse a disposición del partido, Carod definió cómo quiere que sea la Esquerra Republicana del futuro. Abogó directamente por "refundar" el partido para que deje de ser considerado un aliado "poco fiable". A su juicio, la refundación de ERC debería servir para convertir la formación en un partido "serio, abierto, moderado, tolerante, flexible, dialogante" y, añadió, "que transmita estabilidad". Carod recordó que ya pidió la refundación de ERC en una ocasión, en 1986, 10 años antes de empezar la operación para defenestrar de la cúpula a Àngel Colom y Pilar Rahola.