Un territorio dinámico para experimentar el arte

El edificio de Teodoro González de León interpreta una filosofía expositiva que pretende involucrar activamente al espectador. Según Graciela de la Torre, directora general de Artes Visuales de la UNAM: "Se trata de una propuesta museológica que intenta poner tierra de por medio a la concepción grandilocuente, monolítica, didáctica, del modelo modernista de museo; una propuesta que, por llamarle de alguna manera, sería la de un posmuseo".

Unas ideas que se reflejan en su programa de exposiciones y sus estrategias educativas, "puesto que la conceptuación del MUAC ha sido holística", continúa De la Torre. "En la puesta museográfica-curatorial no existe un discurso monolítico, tampoco lineal o fragmentado en salas, sino que lo museístico se convierte en un sitio de yuxtaposiciones y de simultaneidades en movimiento, que activan la temporalidad de la vivencia estética del visitante". Esto quedará patente en el Espacio Experimental de Construcción de Sentido (EECS), donde se alienta al visitante para que exprese y confronte sus opiniones sobre la experiencia en el museo a través de registros y archivos digitales o mecánicos.

Las exposiciones con las que se inaugura el museo se titulan Recursos incontrolables y otros desplazamientos, cuyo comisario Olivier Debroise -fallecido en mayo- hace una lectura de la colección de arte mexicano del museo con 37 obras de gran formato. Pintura, dibujo, instalaciones multimedia, fotografía, vídeo y cine que "evidencian las tensiones y contradicciones entre la práctica artística como un acto mecánico y antinatural que pervierte el orden de las cosas...". José Luis Barrios es el comisario de El reino de Coloso. El lugar del asedio en la época de la imagen, donde se investigan las relaciones entre la violencia y la tecnología en el siglo XX. La muestra Cantos cívicos pone en evidencia los paralelismos irónicos entre agrupaciones humanas y animales y conflictos inherentes al desenlace de la humanidad en la época contemporánea. Completa el ciclo Las líneas de la mano, donde en formas analíticas y documentales o en acercamientos abstractos o poéticos, los artistas develan los mecanismos del capitalismo y consumo artístico actuales.