El fiscal estudia imputar a Adif por el accidente de Valga

Cuando está a punto de cerrarse la investigación judicial sobre el accidente en el paso a nivel de Valga, donde tres vecinos de esta localidad fueron arrollados por un tren, en abril del pasado año, la Fiscalía no descarta ampliar la acusación y hacer corresponsable penal del siniestro a personal de mantenimiento de Adif, la empresa estatal que gestiona las infraestructuras ferroviarias.

Los informes periciales constataron un fallo mecánico en el sistema de apertura y cierre de las barreras, de cuyo funcionamiento es responsable Adif, aunque se hubieran activado las señales luminosas y otros mecanismos de seguridad dentro del convoy siniestrado que alertaron del peligro al conductor cuando se encontraba a más de un kilómetro del paso a nivel.

Hasta ahora es el maquinista del tren el único acusado. Se le imputan tres delitos de homicidio imprudente y se enfrenta a una condena de 4 años de prisión. Debido probablemente a un despiste, no advirtió el encendido de las alarmas que le hubieran obligado a frenar el tren ni tampoco comunicó el fallo al centro territorial de Adif en Ourense, como es preceptivo.

Declaración

En su declaración judicial, Manuel S.L., de 57 años y con 38 de antigüedad en Renfe, aseguró que no recibió ninguna advertencia sobre posibles fallos en el sistema de seguridad y que al pisar el tren la línea de aproximación las barreras tendrían que haberse cerrado automáticamente.

El informe del Ministerio de Fomento advierte la negligencia del conductor pero también admite varios fallos mecánicos. En sus conclusiones señala que ese día se registraron deficiencias en la señalización y en las barreras cuando el tren atravesaba el paso a nivel, partiendo en dos el Renault Laguna y arrastrándolo medio kilómetro tras el impacto.

Las familias de las tres víctimas (dos de ellos padre e hijo) no han percibido ninguna indemnización. Renfe y Adif podrían tener que compartir esa responsabilidad si la Fiscalía amplia su escrito de acusación. Las compensaciones económicas se estiman entre 400.000 y 500.000 euros ya que los tribunales están aplicando cantidades análogas a los accidentes de tráfico.

El maquinista fue apartado del puesto y destinado a las oficinas de la compañía ferroviaria en A Coruña, donde también trabaja la hija de una de las víctimas, que Renfe contrató tras el accidente.