Más problemas que soluciones

La crisis del sistema financiero está en vías de solución gracias a las generosas ayudas ofrecidas por las Administraciones de todos los países afectados.

La reacción de los mercados de valores fue fulminante, al menos en los primeros momentos, y los principales índices de los grandes mercados abrían la semana con subidas históricas que, aun así, no lograban anular el efecto de las caídas, también históricas, sufridas la semana anterior.

El Ibex 35, después de grandes altibajos, termina esta semana con una recuperación del 7,31%, menos de la mitad de lo que perdió en la semana previa, pero suficiente para evitar nuevos procesos de pánico.

En el parqué madrileño se tomaba la situación con cierta filosofía al afirmarse que "el primer problema está resuelto", algo muy importante si se considera que, además, solucionar la cuestión del sistema financiero era prioritario para poder encarar el resto con algunas garantías.

Tras la espectacular subida del lunes, los inversores quedaron como en suspenso al tener un problema "sólo casi resuelto", al tiempo que se anuncia que habrá recesión y que será de las grandes.

Con respecto a la economía real, los inversores han quedado un poco desfasados por la magnitud de los problemas más inmediatos, pero los indicadores económicos han seguido acudiendo a la cita con contundencia. Los únicos datos positivos se refieren al IPC, en regresión gracias al descenso del precio del petróleo, que esta misma semana caía hasta el 50% de los máximos históricos, al cotizarse por debajo de los 70 dólares el barril.

En cuanto a los índices de actividad y confianza, la mayoría han llegado desde Estados Unidos y muestran un severo deterioro de las condiciones económicas. Las ventas minoristas sufrieron en septiembre su mayor caída en tres años, al tiempo que la producción industrial aceleraba su enfriamiento al caer el 2,8%. Ya en octubre, el índice de actividad de la Fed de Filadelfia pasaba de 3,8 puntos a 37,5 negativos y la confianza de los consumidores caía de 70,3 a 57,5.

La situación en la Bolsa española fue favorable, en primer lugar, para los valores bancarios, aunque ya al final de la semana tomaron el relevo las eléctricas al anunciarse la eliminación del déficit de tarifas para 2012, tras quedar en suspenso días atrás la emisión de deuda para cubrir esa cuestión.

El resto de las sociedades han tenido que sobrevivir ajenas a las ayudas o a cualquier solución pública a sus problemas, lo que ha dificultado la actividad de los inversores, al carecer de elementos inmediatos de valoración.

La contratación en el Mercado Continuo descendió hasta los 5.298,44 millones de euros diarios, lo que indica que los inversores mantienen alto el nivel de la prudencia a aplicar en esta coyuntura, al menos en tanto lleguen nuevos datos. -