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Entrevista:JOSÉ RAMÓN FERNÁNDEZ ANTONIO | Conselleiro de Economía

"La competencia entre las cajas es positiva para Galicia"

Como a Fraga el Estado, a cualquier conselleiro de Economía le suele caber el presupuesto en la cabeza. En el caso de Fernández Antonio (Vigo, 1956), además, queda espacio para cierta dosis de independencia a la hora de elaborar las cuentas públicas, de las que presume al asegurar que están elaboradas sin matices políticos. "No hay ningún conselleiro que quede satisfecho", afirma, "lo cual creo que es un buen síntoma". Eso sí, el responsable de las finanzas gallegas pone tierra de por medio frente al BNG y aleja el fantasma de la fusión al advertir que en Galicia hay dos cajas de ahorros "como en Cataluña, diez". Las dos tienen un perfil característico, dice, y la competencia entre ambas es positiva para los gallegos.

"Las cuentas autonómicas están elaboradas sin matices políticos"
"Yo no negocio los Presupuestos, establezco criterios y destino recursos"
"La financiación de las universidades debe estar vinculada a objetivos"

Pregunta. ¿No resulta muy optimista prever un crecimiento del 1,3% del PIB gallego para 2009 y, sobre todo, el mantenimiento del empleo?

Respuesta. Estamos hablando del comportamiento de los agentes económicos. Lo que sí sabemos es que en España desde enero se perdieron 359.000 empleos por afiliaciones a la Seguridad Social y en Galicia, 575. La economía gallega está resistiendo la crisis mejor que otras. Galicia viene creciendo en los tres últimos años por encima de España. Hemos roto una crónica tendencia. Estamos cumpliendo los objetivos de convergencia y esperamos crecer todavía más que nuestro entorno el año que viene.

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P. ¿Qué responderá a quienes le digan que el presupuesto no es realista?

R. Son unos Presupuestos responsables, centrados en las principales prioridades, siendo extremadamente austeros para centrar el esfuerzo en los servicios sociales y la inversión productiva. Son los que necesita Galicia para salir reforzada de la crisis y están orientados a la creación de empleo. Espero que el PP lo entienda así. En nuestras reuniones con sindicatos y patronal ha habido un alineamiento, en el sentido de que éste tiene que ser un esfuerzo compartido.

P. ¿Ha generado la reducción de los gastos corrientes alguna tensión?

R. Desde 2005 se modernizó la técnica presupuestaria y se estableció un sistema de control por objetivos. Se hacen pensando en el ciudadano, en los objetivos que queremos cubrir y a partir de ahí se ven los recursos de los que disponemos. No se trata de gastar más, sino de hacerlo mejor. Esta metodología permite que en los momentos de austeridad se concentren los esfuerzos en objetivos prioritarios.

P. Y en ese marco de cumplimiento por objetivos, ¿qué consellerías se portan mejor?

R. Hay un avance significativo en todas ellas. Y creo que debemos pensar en la forma de gestión que, de cara al ciudadano, es el mayor cambio desde el punto de vista de la Administración.

P. Cuatro consellerías recortan inversiones, dos del BNG y otras dos del PSdeG. ¿Ha pactado este equilibrio?

R. Desde el punto de vista de la política económica hay prioridades cuya ejecución se lleva a cabo por parte de diferentes consellerías. No se elabora el presupuesto pensando en esos matices políticos. Los crecimientos están en las áreas prioritarias.

P. ¿Pero habrá habido negociación con el BNG?

R. El conselleiro de Economía no negocia. Establece criterios y en función de los objetivos destina recursos para llevarlos a cabo. No hay ningún conselleiro que quede satisfecho, lo cual creo que es un buen síntoma.

P. ¿Ha habido muchas modificaciones de última hora, debido el nuevo escenario económico?

R. La Xunta venía tomando medidas para la financiación del tejido productivo. Hemos realizado las cuentas con las últimas previsiones de los organismos internacionales.

P. ¿Se mantiene el nivel de transferencias del Estado?

R. Hay una mayor caída de los ingresos tributarios que de las transferencias del Estado. Y el mix de ambos es una caída de los ingresos no financieros del 1,3%, que se compensa con un recurso a la deuda para reforzar las inversiones productivas. El saldo de todo ello es un crecimiento del 4,2%, que está por encima del alza del PIB nominal. Los Presupuestos son claramente anticíclicos. Terminamos 2007 con un superávit de 100 millones de euros. Nuestras finanzas son sólidas. Eso es un plus para encarar la nueva situación.

P. Dentro y fuera del presupuesto, ¿cuáles son los sectores productivos que más le preocupan?

R. Hay un claro ajuste en el sector de la construcción. Todas las medidas que hemos puesto en marcha en cuanto a obra pública tienen una doble finalidad: la coyuntural, de generación de empleo, y la estratégica, que es la modernización de nuestras infraestructuras. Todas las medidas de fomento de empleo son de carácter horizontal, para facilitar el trasvase de trabajadores de sectores que pierden empleo a otros que lo están demandando. Galicia no quiere competir con salarios bajos, de ahí la apuesta por el I+D+i y la sociedad de la información.

P. Vayamos a lo concreto, la industria auxiliar. Naval, automóvil...

R. La asociación y cooperación aumenta la competitividad del conjunto. Es una de nuestras prioridades. Debemos aspirar a que la industria auxiliar salga favorecida de la crisis. La base económica de Galicia está fundamentada en las pequeñas y medianas empresas y su competitividad también está relacionada con la de las grandes empresas.

P. ¿Teme la Xunta alguna deslocalización en este nuevo escenario de turbulencias?

R. Estamos teniendo un comportamiento mejor que nuestro entorno en términos de empleo, de crecimiento del PIB, de internacionalización... Tenemos que trabajar para salir pronto pero hacerlo fortalecidos. Y tomamos medidas para que todo esto sea posible. Por ejemplo, estamos comprometiendo a bancos y cajas para que cumplan su papel, que es financiar a las empresas. La banca no puede paralizar la financiación, que responde a su propia razón de ser.

P. ¿Le preocupan los vencimientos de deuda de las cajas gallegas?

R. El Gobierno ha tomado medidas para avalar las emisiones de deuda de las entidades financieras españolas, que son una ayuda para el conjunto del sistema. Es muy importante. Con el mercado internacional cerrado son clave los avales del Estado, también para las entidades financieras gallegas.

P. Ante la crisis, Zapatero ha abierto la caja de los truenos de las fusiones, también las interregionales en el caso de las entidades de ahorro. ¿Galicia se tiene que dar por aludida?

R. En Cataluña hay diez. En Galicia hay dos. Cada una tiene su perfil característico. Están jugando bien su papel y la competencia entre ellas es positiva para Galicia. Con esto lo digo todo.

P. ¿Se abordará en la próxima legislatura la nueva Lei de Caixas, teniendo en cuenta que en el congreso del PSdeG también se trató este tema?

R. Estamos llevando a la práctica lo que está contemplado en el programa de Gobierno, es decir, una mayor colaboración con las cajas y una mayor inversión en el ámbito de la obra social. La comisión mixta que creamos funciona bien.

P. ¿Se atreve a ponerle fecha al fin del túnel de la crisis?

R. Todos los analistas internacionales coinciden en que la recuperación llegará a partir del segundo semestre del año que viene. Debemos aprovechar todas las oportunidades para ganar posiciones, porque estamos en un entorno muy competitivo.

P. ¿Cómo se va a retomar la negociación del nuevo marco de financiación autonómica?

R. Comenzamos ahora la segunda ronda. Como comunidad histórica tenemos clara la hoja de ruta en la negociación. Aspiramos a que la financiación por habitante se incremente.

P. ¿Hasta qué punto se verán colmadas las aspiraciones de las universidades gallegas con los nuevos Presupuestos?

R. Hay una clara apuesta por la educación, también la universitaria. Las prioridades están marcadas y, aunque nunca es suficiente, las reclamaciones, en general, están contempladas dentro de un marco de austeridad. En los Presupuestos se superan ampliamente los planes de financiación firmados por las tres universidades con el gobierno anterior. El elemento fundamental es una financiación vinculada a objetivos.

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