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PRODUCTOS

Siemens reduce hasta el 80% el consumo de energía de sus inalámbricos

Siemens ha reducido en hasta el 80% el consumo de energía de sus teléfonos inalámbricos Gigaset, tanto en la estación base conectada a la red eléctrica como en los terminales que van con pilas recargables. Esto significa una menor factura de electricidad y una mayor duración de la batería.

Todos los teléfonos inalámbricos de Siemens llevan desde mediados de 2007 una fuente de alimentación de bajo consumo, que lo reduce de 3,5 vatios a 1,3 vatios de media. Desde 1999, además, la señal que transmite la estación base es más baja si el terminal está más cerca: a menos de ocho metros, el terminal recibe el 15% de la potencia, lo cual supone mayor autonomía del terminal. Ambos desarrollos se conocen en Siemens con el distintivo Eco DECT.

Los modelos Gigaset que saldrán este octubre no consumirán nada de energía cuando estén en modo de espera y vayan colocados encima de la estación base. Para el usuario, tener el terminal así hibernado no supondrá mayor problema, porque reacciona en menos de un segundo cuando recibe una llamada entrante. Al mismo tiempo, Siemens está incorporando en sus teléfonos inalámbricos la tecnología CAT-iq, que amplía el ancho de banda de la telefonía convencional y así la voz de quien habla se reconoce mejor, al ser de una calidad prácticamente igual al CD de música.

CAT-iq funciona de momento en las llamadas hechas con un inalámbrico a través de una red IP, pero con la convergencia de redes de comunicaciones se notará en pocos años en todas las conversaciones telefónicas. Desde que en 1908 se inventó el teléfono, la voz tiene un ancho de banda de 300 a 3.400 hercios, que hace que pueda reconocerse bien quien llama. Con CAT-iq se extiende el ancho de banda de 200 a 6.500 hercios, muy próxima al espectro total de la voz humana (de 180 a 7.000 hercios).

Ludger Rathmer, responsable del desarrollo de la gama Gigaset, destaca que la tecnología inalámbrica no representa ningún problema para la salud, como lo avalan estudios de todo tipo. De promedio, la potencia de la señal de salida es de 10 milivatios a una frecuencia comprendida entre los 1,88 y 1,90 gigahercios. El límite establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en una persona es de dos vatios por cada kilogramo de peso.

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