No hemos 'jugado' a invertir
El director de Planificación y Control de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) tiene claro el porqué de la relativa tranquilidad que se percibe en nuestro panorama bancario. "Las entidades españolas no han jugado a otro tipo de banca, como la de inversión, por lo que no han asumido los riesgos que asumieron esas entidades". Este detalle por sí solo, explicaría, que los bancos españoles estén "más preparados para afrontar la crisis". Sogorb se atreve a hablar, sobre todo, de la entidad que representa. "Puedo garantizar el cumplimiento escrupuloso de las garantías firmadas en todos nuestros productos. Nuestro grado de compromiso, demostrado durante todos nuestros años, no va a cambiar bajo ninguna circunstancia ni coyuntura". Y otro tanto ocurre con los fondos de inversión. "El nivel de riesgo se limita al que voluntariamente quieran asumir los clientes".
El ejemplo español de solvencia debería ser trasladado a otras latitudes. "Vería muy bien que en otras jurisdicciones se tomara el ejemplo y la línea marcada por el Banco de España, la CNMV o la Dirección de Seguros. Además, sería importante que las entidades fuesen más transparentes, lo que permitiría hacer las correcciones oportunas a tiempo".
Pero no son las entidades de crédito las únicas que deben reflexionar sobre su conducta. "Es fundamental revisar el modelo de negocio de las agencias de ratings y sus implicaciones en la actual crisis para evitar los desequilibrios e inexactitudes que se vienen produciendo a la hora de calificar los riesgos (sobre entidades, productos de inversión, tendencias generales, etcétera), ya que está demostrado que cometieron errores de valoración importantes".
El paquete de medidas que ha preparado Estados Unidos para hacer frente a la crisis, le parece al director de Planificación y Control de la CAM, "el mayor intervencionismo estatal en la economía desde la década de los treinta". Una medida que, en todo caso, "da una idea de la situación". Pero Sogorb apunta el dedo acusador también contra lo que considera algunos excesos de los medios de comunicación que no contribuyen a difundir un mensaje de tranquilidad. Y cita dos ejemplos. Por un lado, "un descenso del 10%, no significa que se hunde el mercado tal". Otro ejemplo. Que el ministro de Economía diga que "el sector financiero español es uno de los más solventes del mundo", no se puede interpretar como un síntoma de alarma, sino como la constatación "de un hecho contrastado".
