Una entidad asesora de la Unesco desaconseja el teleférico al Gaiás

La entidad asesora de la Unesco Icomos (Comité Español del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios), desaconseja la instalación del teleférico con el que el Ayuntamiento de Santiago pretende conectar el casco histórico y la Cidade da Cultura. El informe, solicitado por el Gobierno municipal y el Consorcio de Santiago, critica el "impacto paisajístico" del proyecto, que califica como "solución parcial y dudosa". El alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, presentó las dos líneas de telecabinas hasta el Gaiás el pasado julio en el Consello da Capitalidade, donde anunció que su coste ascendería a 20 millones de euros.

Para Icomos, el impacto que causaría en una ciudad como Santiago es "alto e inadmisible". La entidad manifiesta su sorpresa por el interés que suscita el paisaje en el recorrido del teleférico, "cuando el propio proyecto de la Cidade da Cultura fue completamente ajeno a las claves paisajísticas".

El organismo pone en duda que la alta inversión que requieren la infraestructura esté justificada, teniendo en cuenta que el complejo del monte Gaiás "está lejos de contar con un proyecto cultural sólido, solvente y viable". "Es difícil y arriesgado argumentar la necesidad de una infraestructura de tanto impacto basada sólo en conjeturas y sin saber cómo va a funcionar realmente la Cidade da Cultura", indica el informe.

El comité reconoce que la Cidade da Cultura creará un importante flujo de turistas, pero estima que la solución al problema de movilidad que esto genere "no puede ser relegada" al teleférico. A juicio de la entidad, el complejo del Gaiás "planteará conflictos urbanos de todo tipo", ya que se introdujo "de forma arbitraria por una decisión política poco acertada".

Icomos reconoce que el proyecto del teleférico es reversible, como defiende el Ayuntamiento, pero advierte de que la posibilidad de volver atrás "no lo justifica todo", ya que la gestión de patrimonio exige "prudencia". Aconseja retomar la tranquilidad y el ritmo adecuado en la elaboración del proyecto.

Propone crear un plan de movilidad general en el ámbito de Santiago para tratar los problemas de accesibilidad que presenta la ciudad. También aconseja al Ayuntamiento y al Consorcio que sean más "sensibles" a las opiniones ciudadanas. Para terminar, recomienda que se defienda un modelo de ciudad fuera de "las veleidades de políticos, más interesados en dejar su huella en la ciudad que en proteger sus verdaderos valores culturales".