Alicante inicia la racionalización del calendario universitario

Disparidad de criterios y opiniones encontradas. El debate sobre el inicio de las clases en los campus está abierto. La Universidad de Alicante ha puesto en marcha este curso un nuevo calendario escolar que arrancó el pasado lunes y que permitirá concluir el primer cuatrimestre antes de Navidad, y las clases del segundo finalizarán el 22 de mayo. La medida también afectará, previsiblemente, a los exámenes de septiembre que se podrían adelantar al mes de julio, tal y como plantea la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE). El cambio no gusta a todos, y sobre todo a los estudiantes que temen pasarse "las vacaciones de navidad empollando", ya que los exámenes del primer cuatrimestre empezarán el 7 de enero.

"Otro problema es que empiezan sin tener las notas de selectividad"

La Jaume I medita cambiar y el CEU ya lo hace y adelanta la repesca a julio

La Universidad CEU Cardenal Herrera también estrena calendario este año para converger con Europa. Las clases preparatorias para los alumnos de nuevo ingreso comenzaron el 8 de septiembre, y el 10 de julio terminarán los exámenes extraordinarios, que reemplazan a los de septiembre. La Politécnica de Valencia ya aplica este adelanto en algunas ingenierías para poder impartir todo el temario. La Universitat de València no tiene previsión, por ahora, de abordar esta reforma, y sus clases empezarán el 22 de septiembre y terminarán el 5 de junio. La Jaume I de Castellón sí que medita adelantar el inicio de sus clases, pero este año mantiene el calendario y arrancará el 24 de septiembre. La Miguel Hernández tampoco se suma a la iniciativa.

La CRUE ha creado una comisión de expertos que defiende converger con el calendario europeo. Los rectores instan, además, a que se vaya pensando en adelantar los exámenes de septiembre a julio. El principal motivo del adelanto esgrimido por el rector de Alicante, Ignacio Jiménez Raneda, es la convergencia con Europa, con el calendario anglosajón el intercambio de alumnos es más fácil. "Para incrementar la movilidad de los alumnos hay que darles facilidades, y antes todo eran problemas", dice Raneda. Los estudiantes erasmus llegaban a Alicante cuando las clases no habían empezado, y cuando se tenían que ir no habían terminado, y viceversa. Cuando un alumno de Alicante tenía las notas de septiembre y toda la documentación lista llegaba a un campus europeo con las clases iniciadas. En Alicante, además hay otro aliciente, y es que el curso terminará antes de las fiestas de Fogueres.

Los exámenes del segundo cuatrimestre serán del 23 de mayo al 13 de junio, final de curso para el que apruebe todo. Pero el nuevo calendario plantea otra objeción, que son los exámenes de la selectividad. En esto incide Fernando Borrás, vicerrector de Estudiantes y Extensión Universitaria de la Miguel Hernández de Elche, que recuerda que habrá "alumnos de nuevo ingreso que hayan empezado el curso en Alicante con la preinscripción sin saber las notas de los exámenes de la selectividad que se celebraron la semana pasada". Según el vicerrector de la UMH para cambiar el actual calendario es "conveniente esperar" a que el Gobierno concrete detalles de la nueva Ley de Acceso, y que la CRUE marque unas directrices concretas. "Nosotros, por ahora, no tenemos previsto modificar nada", apunta Borrás cuya universidad empezará las clases 29 de septiembre.

El profesorado del campus de Alicante también está dividido entre los que están a favor y en contra. Antonio Escudero, ex decano de la Facultad de Económicas, se pregunta si "en España es razonable examinarse después de Navidad, hasta ahora el mayor esfuerzo se hacía en junio y julio, y ahora será en enero". Miguel Ángel Goberna, profesor en el departamento de estadística, cree "lógico" que se integre también el número de semanas lectivas, (22 en Inglaterra y 30 en España), "pero parece que sea un tema tabú o políticamente incorrecto", cuando no se trata de trabajar menos, sino de que el alumno "estudie más en su casa". Goberna vaticina "una catástrofe" por los suspensos de los exámenes de enero. Jorge Olcina, del departamento de Geografía, recuerda que en otras universidades españolas se está haciendo desde hace años, pero se deberían plantear "algunos ajustes", como adelantar la selectividad o que las vacaciones del personal docente empezaran la última semana de julio para que la última de agosto "sea lectiva y se pueda poner en marcha toda la maquinaria".