_
_
_
_
gente

Sarao popular en el enlace de la biznieta de Franco

Los vecinos parodian la boda a las puertas del pazo de Meirás

Menudo sarao festivo-popular se armó ayer ante el pazo de Meirás con motivo de la boda, en el dominio de los Franco, de la biznieta del dictador Leticia Gimenez-Arnaú Martínez-Bordíu con su novio salvadoreño Marcos Sagrera Palomo. Dentro del pazo (hoy propiedad de los herederos de Francisco Franco), 300 invitados asistieron al enlace y posterior banquete, de los que apenas trascendió nada. Fuera, a las puertas del amurallado y muy custodiado pazo, una muchedumbre que duplicaba los asistentes a la boda participó, con cantos, bailes y mucho humor, en la festiva parodia. Había sido organizada por la Comisión Por la Recuperación de la Memoria Histórica en su campaña por "la devolución al pueblo" de un bien -el pazo que Emilia Pardo Bazán tenía por refugio literario- que, pagado con dinero público, descuentos en nóminas y expropiaciones forzosas a cambio de nada, fue donado al caudillo en plena Guerra Civil.

A las puertas de Meirás había una verbena genuina, empanada, pulpo y vino incluidos, en la que no faltaron escenas surrealistas cuando llegó la comparsa coruñesa de Os Maracos. Todos vestidos de guardia mora escoltaban a un Franco de espectacular parecido que, llevando de la mano a una novia, fue recibido a gritos de "Franco cabrón, trabaja de peón" y con burlas cantadas como "No estaba muerto, estaba de parranda".

Hace apenas una semana que la Xunta, tras año y medio de litigio con los Franco, logró iniciar los trámites para dar especial protección al pazo de Meirás y darle un mínimo uso público, al obligar que se abra cuatro días al mes. Pero cobra cada vez más fuerza la petición de reversión al patrimonio público de un singular castillo de tres torres y sus jardines de más de seis hectáreas que fueron entregadas a Franco en 1938 por la provincia de A Coruña en su calidad de jefe de Estado.

"Fue un robo, y ahora esta boda es una provocación", se indignaba ayer Olga, una coruñesa de 74 años, "cuando entré a trabajar con 13 años en una fábrica de telares de A Coruña, me descontaban una peseta de mi sueldo de 41,5 pesetas para pagar el pazo. Yo lloraba pero mi padre me decía 'calla, neniña, que a mí también me lo quitan'. Yo callaba pero ahora ya no", decía Olga.

Provocación o no, fue empeño de la novia, Leticia Gimenez-Arnaú, la de casarse ayer, y pese a la polémica sobre la propiedad, en el mismo lugar que lo hicieron hace 31 años y cinco días sus padres, Merry Martínez-Bordiu con el periodista Jimmy Giménez-Arnau, ayer el gran ausente por no estar invitado.

La comparsa Os Maracos, vestidos de Franco y Carmen Polo.
La comparsa Os Maracos, vestidos de Franco y Carmen Polo.AMADOR BLACH

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_