José Such, primer alcalde de Benidorm en la democracia

José Such Ortega, alcalde de Benidorm entre 1979 y 1983 por UCD, falleció la madrugada del jueves, a los 81 años, por una afección pulmonar. Fue el primer alcalde de la democracia en la ciudad alicantina en unos años marcados por la falta de recursos económicos en las arcas municipales y por la fragmentación e inestabilidad política. Such, un político de perfil bajo, estuvo marcado por su condición de foráneo en el pueblo que gobernó. Antes del turismo, la pesca del atún era la principal actividad económica en Benidorm, y el padre de Such Ortega fue administrador general del Consorcio Nacional Almadrabero. El ex alcalde nació en Barbate (Cádiz) y se licenció en Derecho en Sevilla, donde entró en contacto con grupos monárquicos y liberales que le pusieron en contacto con don Juan, exiliado en Estoril, a quien profesaría gran devoción.

Such explicó recientemente que en 1979 fue Miguel Barceló, actualmente senador del PP, uno de los políticos más poderosos de Benidorm, quien le visitó acompañado de un jovencísimo Eduardo Zaplana. Ellos le dijeron que reunía el perfil para ser el alcalde. Sin embargo, empató con siete concejales con el PSOE, que le ganó por tan sólo cuatro votos. Such pactó primero con los independientes de derechas y después con el PSPV-PSOE, con una moción de censura en medio de su mandato. La debacle del partido de Suárez después de 1982 y los permanentes conflictos sociales de Such en la ciudad le llevaron a presentarse en 1983 con una lista independiente para saber qué opinión tenía el pueblo de él, según explicó con posterioridad. Tan sólo sacó un concejal y dimitió. Posteriormente, se alejó de la política. Such Ortega tenía cinco hijos, tres de los cuales siguieron sus pasos y se licenciaron en Derecho; entre ellos, Angélica Such Ronda, actual consejera de Turismo de la Generalitat valenciana.

En una ciudad con múltiples carencias tras el vertiginoso crecimiento de las décadas anteriores, Such logró adquirir y desclasificar como urbanizable el parque de l'Aigüera, convertido hoy en el principal pulmón verde de la ciudad vertical. Llevar a Benidorm los juzgados y el registro de la propiedad, adquirir la plaza de toros y los terrenos del polideportivo, y construir la primera depuradora fueron algunas de sus obras, que le valieron la medalla de oro de la ciudad, la medalla al mérito turístico y ser proclamado hijo adoptivo de Benidorm.