El Ayuntamiento de Vigo tendrá que indemnizar a 40 taxistas

El ayuntamiento de Vigo ha sido condenado a abonar indemnizaciones a 40 taxistas a los que, hace 16 años, otorgó licencias que después retiró por orden judicial. El dilatado proceso comenzó en 1992, con el socialista Carlos Príncipe de alcalde del gobierno tripartito junto a Esquerda Galega y al BNG. La coalición decidió conceder en aquella época 100 nuevas licencias ante el aumento de población de la ciudad (las últimas se habían otorgado en el año 76). Posteriormente, el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, en 1993, y más tarde el Tribunal Supremo -en 1996-, anularon dicho acuerdo plenario por no estimar acreditada la necesidad de esas nuevas plazas de autotaxi, lo que obligó a congelar el proceso y a retirar las primeras 40 concedidas.

Como consecuencia de esa decisión, esos primeros beneficiados presentaron una demanda y pidieron una indemnización, que 16 años después recibirán a una media de 35.000 euros por afectado.

Para el ex alcalde, que ha vuelto a su trabajo como pediatra, aquella fue "una medida respaldada por la izquierda social de la ciudad. En aquel entonces había taxistas que llevaban más de diez años explotados. Los traspasos de taxi se cotizaban a 20 millones de pesetas. Se conseguían clarísimas plusvalías. Cuando decidimos ampliar las concesiones, la Xunta sacó un reglamento que lo invalidó". Según Carlos Príncipe, el fallo "devuelve ahora a los taxistas el millón y medio de pesetas que pagaron en el 92 por sus licencias junto con los intereses, ni más ni menos". No lo ve así el actual alcalde, el socialista Abel Caballero, quien asegura que la sentencia "hará que las arcas municipales se resientan por una decisión tomada por gobiernos anteriores".