Una 'sin techo' antes de nacer

Sheila es la niña que aún crece en el vientre de Sandra Abellán. Su madre todavía no sabe dónde vivirá cuando nazca. Sandra fue desahuciada el jueves de la casa en la que vivía en Coslada, un piso en régimen de alquiler del Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) que compartía con Naomi, su hija de 10 años.

Sandra cuenta que hace cuatro años el inquilino del piso le ofreció realquilarle la vivienda -algo que está prohibido- por 300 euros al mes. La mujer, que no conocía la ilegalidad, aceptó el trato porque el piso está en el mismo edificio, puerta con puerta con el de su madre. Hace 20 meses, se quedó sin trabajo y no pudo pagar un par de mensualidades. "Entregué al hombre el dinero de los meses que le debía y luego no me dejó pagarle más. Decía que la vivienda estaba dada de baja", es decir, que renunciaba a ella y la devolvía al Ivima para que la alquilara a otro. "Yo hablé con el Ayuntamiento para intentar regularizar mi situación, pero nada. Hasta que recibí una carta diciéndome que estaba de okupa en el piso, hará año y medio. No me dieron opciones. Cuando recibí la orden de desalojo les pedí una prórroga hasta que diese a luz, pero tampoco", concluye. Sandra se ha ido a vivir provisionalmente con su madre, aunque el piso es demasiado pequeño para tres personas.

Según un portavoz de la Consejería de Medio Ambiente y Vivienda, la mujer ocupó la casa ilegalmente hace un año y ocho meses, informa Álvaro H. Rivero. Para la consejería, la vivienda llevaba tres meses vacía cuando Sandra entró en ella, en diciembre de 2006. El Ivima denunció la situación y ahora ha procedido al desahucio.