Interior desmantela el 'comando' más activo de ETA desde la tregua

Los ocho presuntos etarras detenidos ayer en Vizcaya, Pontevedra y Málaga junto a su jefe, Arkaitz Goikoetxea, formaban parte del comando Vizcaya, autor de casi todos los atentados registrados en el último año, desde el final de la tregua. Era "el más activo, dinámico y buscado", en palabras del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. A los terroristas del grupo se les atribuye, entre otros actos criminales, la bomba que estalló en mayo frente a la casa cuartel de Legutiano (Álava), donde murió un guardia civil.

El comando o complejo Vizcaya preparaba una nueva campaña de artefactos en verano. Los cuatro que estallaron el fin de semana en Cantabria serían un anticipo. En la casa de Bilbao donde fue detenido Goikoetxea se encontraron mapas de ciudades andaluzas y de la Costa del Sol, así como de Lisboa; dinero preparado para su reparto y un detonador, además de una pistola y un revólver cargado, junto con munición.

Goikoetxea, de 28 años, encabezaba un grupo de legales (no fichados) cuya edad no supera los 26 años, lo que para la policía prueba el relevo generacional registrado en la banda. Con Goikoetxea, el comando tenía otro liberado (a sueldo), Jurdan Martitegi, que no ha sido encontrado. El líder del PP, Mariano Rajoy, expresó su "apoyo incondicional" al Gobierno.