_
_
_
_
_
Reportaje:TOUR 2008 | Ante los decisivos Alpes

El ruso de las viejas zapatillas

Al meticuloso Menchov le encantan el caos y las bromas, el chuletón y el vino

Eleonora Giovio

El día después en Prato Nevoso es como el día después de una gran juerga. Algunos, los que salen pronto por la mañana, aprecian más el olor a resina de los pinos, como Denis Menchov, que ayer, jornada de descanso, volvió a subir el puerto con sus compañeros de equipo. Y otros aprecian lo que son los Alpes italianos, que, por mucho Imax que haya, siguen siendo los Alpes italianos. Así que, mientras que en las etapas en Francia las vallas y la basura acumulada desaparecen enseguida, en Italia empezaban a recogerlas ayer y, al ritmo que llevaban, quizá las vallas se queden hasta Navidad. Los carabinieri están más pendientes de lucir el uniforme y hablar por el móvil que de otra cosa y los obreros de saludar a todo el que se mueva.

Más información
El camarote de los hermanos Marx

A Menchov, el ruso que ha echado raíces en Pamplona, pero que va y viene a Orel, la ciudad de su país en la que tiene terrenos y donde sigue viviendo su familia, el caos italiano le debería sacar de quicio. Pero resulta que no, que es un ruso atípico, que la anarquía italiana le hace tanta gracia que el domingo, cuando en una de las rotondas a pie de puerto se produjo una buena montonera y se cayeron unos 30 ciclistas, le vaciló a McEwen: "Por lo que veo, muchos de vosotros no habéis corrido el Giro. Si no, sabríais que las rotondas no se toman tan rápido". Giancarlo Ferretti, ex director de Felice Gimondi, ex manager, entre otras escuadras, de Fassa Bortolo y eterno enamorado de la bici, le define como "un duro que da lo mejor de sí en la distancia larga".

Eso, entre los pedales. Fuera, es un chico de campo. Uno de los que no se olvida de donde ha crecido. Uno que se sigue lavando la ropa, las zapatillas -dicen sus compañeros que, llueva o nieve, son las más limpias de todas- y que ayer, cuando le dieron un par de ellas nuevas con su nombre y la bandera rusa, dijo que no; que, si acaso, para el invierno que viene, cuando se hayan desgastado las que lleva. Es tan ordenado que su maleta siempre parece recién comprada. Ni siquiera le quita la etiqueta que pone "diez años de garantía". Lo mismo pasa con las mochilas. "Es meticuloso, metódico y tranquilo. Parece tímido y lo es, pero se suelta cuando coge confianza", comenta la columna española del Rabobank, con la que comparte charlas en los momentos de relax.

Pero también tiene su punto de locura. Como ayer. En la jornada de descanso, animó a todos -y, por supuesto, descolgó a todos- a subir Prato Nevoso. "No hay que perder el ritmo. Si no, el cuerpo se engaña y no arranca", se justificó. O como hace un par de años, cuando en un día de reposo en Pau alquiló un coche y se fue directo a Pamplona. Se comió un buen chuletón, acompañado de una buena copa de vino, y volvió como si nada mientras todo el mundo le llamaba por teléfono preguntándose dónde se había metido. Ahora todos saben que está en los Alpes, encantado con el caos italiano y calzando zapatillas antiguas.

Menchov, en el centro, durante la séptima etapa del Tour.
Menchov, en el centro, durante la séptima etapa del Tour.ASSOCIATED PRESS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Eleonora Giovio
Es redactora de deportes, especializada en polideportivo, temas sociales y de abusos. Ha cubierto, entre otras cosas, dos Juegos Olímpicos. Ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS; ha sido colaboradora de Onda Cero y TVE. Es licenciada en Ciencias Internacionales y Diplomáticas por la Universidad de Bolonia y Máster de periodismo de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_