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Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Tony Snow, ex portavoz de la Casa Blanca

Pasó de considerar "ridículo" a Bush a ser su cara amable

Tony Snow, portavoz de la Casa Blanca entre mayo de 2006 y septiembre del año pasado, murió ayer de cáncer de colon en Washington, a los 53 años. Con una carrera forjada en medios conservadores, Snow supuso un cambio sustancial para una Administración deseosa de mejorar sus relaciones con la prensa, después del hermetismo con el que se había informado a los medios sobre la invasión de Irak. Después de la extremada prudencia de su predecesor, Scott McLellan, Snow trajo una bocanada de aire fresco a la sala de prensa del Ala Oeste. Los periodistas no le amedrentaban. Al fin y al cabo, él era uno de ellos. No temía entrar en discusiones con los reporteros. Sabía qué cortes de voz dar para las radios y televisiones. Y conocía qué poses quedaban mejor en cámara.

Fue, fugazmente, la cara popular de la Administración de Bush. Su fortuna sólo duró 17 meses. A Snow ya se le había diagnosticado un cáncer de colon en 2005, un año antes de incorporarse a la plantilla de la Casa Blanca. Pareció superarlo, pero en marzo de 2007 se tuvo que someter a una operación para que los doctores le extirparan lo que creían que era un quiste benigno en el abdomen. Resultó ser una recurrencia del cáncer, que se había extendido a su hígado.

En principio dejó la portavocía por seis meses, pero pasado este tiempo decidió abandonar el puesto definitivamente e incorporarse a la cadena de televisión CNN como comentarista, un trabajo más apacible y mejor pagado que el de la Casa Blanca.

El presidente se mostró muy afectado ayer. Dijo en un comunicado que "América ha perdido a una persona entregada al servicio público, a un hombre de carácter". "Era un placer ver a Tony en el podio cada día. Nos aportaba inteligencia, gracia, y un gran amor por su país y su trabajo". El afecto de Bush es justificado. Durante sus meses en la Casa Blanca, Snow fue un defensor acérrimo del presidente. El diario The Washington Post le llegó a definir ayer de "combativo" en su papel de barrera de contención contra unos medios cada vez más críticos con la gestión del presidente.

Nacido en Kentucky, sus años de Universidad los pasó en Carolina del Norte, donde se convirtió brevemente a la causa del marxismo. Posteriormente dejó la filosofía por el periodismo, y comenzó un viaje ideológico al conservadurismo, que culminó cuando se convirtió en presentador de la cadena de televisión Fox News. En 2003, Snow comenzó su propio programa de radio en el conglomerado multimedia de Fox. En su tertulia se mostró como un durísimo crítico de Bush. Dijo de él que era un presidente "impotente", con una política doméstica "incongruente" y que había "perdido el control de los presupuestos". "George Bush se ha convertido en algo parecido al ridículo". Cuando Bush le llamó para ofrecerle el puesto de portavoz, se justificó diciendo: "Presidente, debería haber oído lo que dije de los demás".

Él mismo definió su trabajo en el mundo político de Washington como la "Disneylandia de las comunicaciones". Conocía como el mejor la puesta en escena, y sabía bien que, en política, el mensaje es tan importante como la escenografía. En una ocasión, un reportero radiofónico le preguntó si iba a evadir una cuestión complicada yéndose por las ramas. "No", dijo, y sonrió. "Me voy a reír de ella".

Tony Snow cuando era portavoz.
Tony Snow cuando era portavoz.REUTERS

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