Rejas contra 17.000 toneladas de algas

Un mar de algas sigue inundando la costa de Qingdao, sede de las regatas de vela de los Juegos de Pekín, mientras el Gobierno chino se apresura a luchar contra la plaga con cientos de soldados desplazados al litoral. Lin Hong, portavoz de la oficina de prensa exterior estatal, reconoció ayer que la marea verde supone ya 17.000 toneladas de algas, aunque aseguró que la invasión "no afectará a los Juegos" y que las tareas de limpieza, en las que están participando miles de voluntarios, dejarán la playa limpia el 15 de julio.

La Administración Oceánica Estatal, el gobierno provincial, la ciudad de Qingdao y las fuerzas armadas locales han instalado un cuartel general de emergencia para luchar contra la proliferación de algas y cubrirán la zona con 32.000 metros de rejas para frenar su avance. "Están afectando a los entrenamientos de los regatistas", admitió Hong. Navegantes de 30 países se entrenan (o lo intentan) en Qingdao para preparar los Juegos, entre ellos tres tripulaciones españolas.

Una barrera de 32.000 metros de longitud aislará el mar de Qingdao

El Ministerio de Transporte ha ordenado la colaboración de nueve provincias cercanas a Qingdao, que han enviado una reja especial con la que pretenden crear un tope y acordonar el espacio en el que tendrán lugar las competiciones el próximo agosto. Según los científicos, las algas, típicas de zonas más cálidas, son incluso beneficiosas para el medioambiente "porque limpian el agua", aunque están asociadas al uso de fertilizantes y productos químicos en los campos y en la industria, vertidos en los ríos.

España, mientras, llegará a los Juegos de Pekín como el segundo país en la clasificación mundial de vela, sólo superado por Australia, según anunció ayer la Federación Internacional. Iker Martínez y Xabi Fernández, en la clase 49er, y Marina Alabau, en RSX femenino, son los primeros del mundo en sus respectivas modalidades.