La carrera de las 'retro-zapas'
El calzado 'vintage', objeto del deseo de todos los coleccionistas - Las marcas más importantes se apuntan al 'revival' de los viejos modelos
El futuro del mundo de las zapatillas se encuentra en el pasado. O así lo parece si uno se dedica a pasear por las calles de las ciudades más cool y a darse una vuelta por sus tiendas de calzado deportivo (cuanto más exclusivas mejor). Lo que los entendidos llaman retro-running ha llenado los catálogos de las principales marcas de antiguos modelos de las décadas de los setenta, ochenta y noventa, que vuelven a la vida en versiones mejoradas y en muchos casos ultralimitadas. Nike, por ejemplo, ha resucitado las Structure Triax, un modelo del año 91 conocido por su estabilidad y capacidad de amortiguación y le ha añadido un plus de tejido y diseño, convirtiéndola en objeto de deseo por parte de los coleccionistas de zapatillas, que la consideran una de las ideas más brillantes de los últimos tiempos. Para Alex Cruces, estilista y coleccionista de zapatillas afincado en Barcelona, el retro-running es lo mejor que le puede pasar al mundo de las zapas. "Son modelos robustos en su concepción, pensados para durar, muchos de ellos técnicamente impecables y que sólo necesitaban un lavado de cara en algunos aspectos. Las Structure o las Ventilator son ejemplos perfectos de grandes zapatillas que han vuelto a ver la luz del día gracias a esta tendencia, aunque no tengo ninguna duda de que el retro se va a convertir en una parte importante de las colecciones de cada marca".
También Adidas ha decidido convertir 2008 en el año de la ZX, un modelo mítico del running que ha sido el escogido -en cualquiera de sus versiones, de la 450 a la 7000- para que las mejores tiendas del mundo (incluyendo a Colette en París, Undefeated en Los Ángeles o Alife en Nueva York) lo tomen como base para la campaña más exclusiva de la marca de las tres bandas en toda su historia.
Otras marcas, como New Balance, han conseguido nueva vida a través de la explotación de sus clásicos vintage de siempre, como la 750 o la 1500. Puma ha devuelto la suela Trinomic a las calles con las Blaze of Glory, gracias a su doble colaboración con la revista australiana de locos por las zapatillas Sneaker Freaker. Simon Wood, su editor, admite por teléfono desde Melbourne (Australia) que el retro-running ya lleva tiempo siendo una tendencia muy fuerte: "Y ha llegado para quedarse. La clave del tema es que las marcas saben perfectamente que las personas clave en este negocio son los compradores y coleccionistas de más de 30, ya que éstos influyen en una gran cantidad de público muy versátil y que cambia de estilo con mucha facilidad. Los treintañeros estamos muy cansados de zapatillas blandas y sin historia. Recuperar buenas zapatillas de los ochenta y los noventa es una idea que funciona por sí sola".
Lo mismo deben pensar en Le Coq Sportif, que ha hecho del retro-running su gran bandera en 2008, con la reedición de las Milos Pois, las Eclat o las Quartz 87 convenientemente puestas al día. Pero si hay una marca que ha empujado con sabiduría la nueva moda del vintage ésa es Onitsuka: su colaboración de 2007 con la tienda holandesa Patta utilizando un modelo emblemático para los corredores como la Gel-Lyte III, sentó las bases de una nueva manera de entender las zapatillas, al combinar la comodidad de una confortable zapatilla clásica de jogging con la innovación de tejidos y colores que necesita una zapatilla del siglo XXI y el marketing que proporciona vincular Onitsuka a una de las mejores boutiques de Europa. Otros, como la británica Reebok, con el especial mimo que están recibiendo modelos como las Ventilator o las ERS y el -esperado regreso- de Saucony, que se ha lanzado a la conquista del mercado norteamericano con sus Shadow 6000, sólo confirman que esta tendencia no ha hecho más que empezar.
Es el estímulo del pasado, probablemente fruto de la nostalgia y de, como dice Wood, la influencia del consumidor maduro. Lo que en inglés se conoce como sneakerhead o cabeza de zapas.
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