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Entrevista:Carreras & Capital humano

Un jefe que bloquea las ideas

PREGUNTA. Desde que hace seis meses me incorporé a mi primer empleo, en el departamento de Marketing de una importante cadena de franquicias, me he esforzado por ser un trabajador proactivo, capaz de aportar ideas y soluciones nuevas a los problemas habituales. Pero mi jefe directo, quien me seleccionó para entrar en la compañía, es incapaz de tomar decisiones rápidas. Cada vez que le planteo una idea o un proyecto, generalmente no lo rechaza, pero me exige planes detallados que tengan previstas todas las eventualidades e insiste en supervisar cada detalle, aunque la realidad es que está desbordado. No digo que todas mis iniciativas sean brillantes, pero me siento bloqueado y con ganas de buscarme otro sitio, aunque temo que si me marcho tan pronto quede como un borrón en mi currículo difícil de explicar. ¿Qué opinan ustedes? J. M. Valencia.

RESPUESTA. El hecho de aportar nuevas ideas y soluciones nada más incorporarse al mundo laboral denota su entusiasmo e ilusión por el proyecto empresarial que ha emprendido. Muy probablemente estas cualidades fueron percibidas por su jefe directo en el momento en que tomó la decisión de contratarle y, por eso, forma parte de su equipo.

Seguramente sus aportaciones son muy válidas, pero todavía lleva poco tiempo en la compañía y la opinión de otras personas más veteranas puede enriquecer sus iniciativas. El que su mánager se preocupe en profundizar sobre las ideas que plantea significa que está interesado en analizarlas y valorar su viabilidad. Le animo a que siga aportando ideas y a luchar por conseguirlas a través de la relación y cooperación con su jefe directo. No se desanime si rechazan alguna iniciativa después de haberla contemplado, ya que lo importante es que las valoren, independientemente de cuál sea el resultado.

Por las inquietudes que plantea, se deduce que tiene gran ambición de crecimiento; ganas de aportar y aprender.

Nuestra recomendación es que se tome algo más de tiempo para "bucear" en la empresa y sus procedimientos, el puesto de trabajo y las relaciones con los compañeros, otros departamentos y su mánager directo. Sólo de esta forma podrá ganarse la confianza de los que le rodean y, al mismo tiempo, tendrá más argumentos para defender sus iniciativas.

Cuando una persona se incorpora a una organización requiere un periodo de adaptación tanto por parte de la empresa como del empleado. Dentro del ámbito de los recursos humanos las compañías gestionan este aspecto a través de planes de acogida, formación y tutorías. No obstante, debe ser consciente de que se trata de su primer empleo y el éxito profesional no va a depender sólo de su entusiasmo e iniciativa, sino también de su capacidad de aprendizaje y autocrítica. Aprovéchese del carácter exigente de su jefe para reflexionar sobre sus aportaciones y mejorar en el día a día.

Judith Mestre es directora de Operaciones de Hay Selección.

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