Cristiano Ronaldo abate a Cech
El delantero firma el triunfo de Portugal sobre la República Checa, que se manejó con bravura
Cristiano Ronaldo firmó la victoria de su equipo sobre el de Cech. A ambos se les concedió un protagonismo especial, como si la suerte del partido estuviera en los pies del delantero o en las manos del portero y no en el litigio entre portugueses y checos, interesados ambos en alcanzar el liderato y los cuartos de final. Ronaldo sintetiza el espíritu ofensivo de Portugal mientras que la capacidad defensiva de la República Checa está representada por Cech. El resultado certificó el triunfo del luso. Ronaldo marcó un golazo, el segundo, e intervino en los otros dos de forma distinta: en el primero provocó el rechace que aprovechó Deco y en el tercero asistió a Quaresma para que, una vez vencido Cech, marcara a puerta vacía. Resuelto individualmente, el encuentro fue colectivamente muy peleado porque los checos se defienden con cuatro zagueros del calcio que se las saben todas a la hora de trampear el juego y porque los portugueses, además de un centrocampista excelente, Deco, tienen peligro en las dos áreas: la contraria por sus buenos delanteros y la propia por su fragilidad defensiva.
Los lusos actuaron de salida con suficiencia, como unos nuevos ricos
Scolari, elogiado como psicólogo, hizo que se espabilaran tras el descanso
Cristiano Ronaldo, en la Eurocopa |
Cech, la estrella de la República Checa |
Los próximos partidos |
A Portugal le pudo de salida la suficiencia, lógica si se atienden los parabienes que recibe a diario y desproporcionada si se cuenta que sólo había derrotado a Turquía, a la que se le ha parado el reloj futbolístico. Actuó como un nuevo rico, con un punto de desdén, confiado en el aura que desprenden futbolistas como Ronaldo. A Portugal no le llaman porque sí el Brasil de Europa. El gol de Deco le vino que ni pintado para agrandar su autoestima y no reparar en el encuentro. El volante se vio con la pelota despedida por Cech después de que Ronaldo hubiera tirado una pared con Nuno Gomes y la acompañó a la red. Muy fácil. Portugal creyó que no hacía falta jugar al fútbol para ganar a la República Checa.
Ocurre que la selección de Scolari tiene problemas estructurales tan serios que no puede abandonarse ante ningún adversario por más ventaja que tenga. No basta con tener buenos delanteros si no se cierra en la medular, fallan los laterales, especialmente Paulo Ferreira, y el portero tiene las manos blandas, sobre todo en los balones laterales. Los checos respiraron por la derecha, con Sionko encarando a Ferreira y provocando la ayuda de uno de los centrales, pendientes ambos, por otra parte, de Baros. Brückner prefirió una liebre a un gigante, a Baros en vez de a Koller, y su equipo tuvo más dinamismo y llegada, una mejor cintura. Así, Sionko forzó un saque de esquina en una entrada preciosa y, a su salida, el propio delantero cabeceó el centro bien puesto por Plasil.
Igualado el marcador, el partido se puso muy bravo, trabado, con faltas tácticas reiteradas. Los checos estaban encantados con el cuerpo a cuerpo porque son más altos y fuertes que los portugueses. La calidad física se imponía a la técnica. Antes confiado, Portugal pasó a sentirse preocupado. No estaba a gusto en el campo, no tenía la pelota, no tocaba a las bandas y sus extremos no profundizaban ni desbordaban, de manera que no había ocasiones.
Los portugueses espabilaron después de la intervención en el descanso de Scolari, discutido como entrenador y elogiado como psicólogo, efectivo con sus arengas. Aunque continuaron expuestos a recibir cualquier gol, juntaron mejor las líneas con Deco al frente, de medio y delantero; tomaron la iniciativa, ganaron el campo ajeno, se arrimaron al área y comenzaron a apuntar a Cech. A diferencia del primer tiempo, la concentración en la tarea fue entonces tan extrema que consiguieron el segundo gol con un jugador menos, con Moutinho en el suelo, y Deco abriendo como extremo por la derecha. El interior puso el centro al punto de penalti y Cristiano Ronaldo enganchó un remate duro e imposible para Cech.
A Brückner no le quedó más remedio que recurrir a Koller para reforzar su ofensiva. El juego aéreo podía ser una buena solución para vencer a una zaga portuguesa que tiritaba en cada ataque. A su rescate acudió con los cambios Scolari, siempre intervencionista, lo requiera o no el partido. Volcados los checos en el portal de Ricardo, la pelota se escapó por el lado derecho. Portugal montó una contra muy rápida, con Ronaldo de asistente de Quaresma, y se acabó el partido como ya pasó ante Turquía. Aunque las manos del arquero son de mantequilla, Ronaldo tiene dinamita en sus botas.
Cristiano Ronaldo es ya uno de los deportistas más famosos del mundo (lalistaWIP)
Scolari ficha por el Chelsea
La polémica salta a veces por donde menos se la espera. Los componentes de la selección portuguesa se habían comprometido a no hablar de su futuro hasta que finalizase su participación en el torneo. Sin embargo, al propio técnico, el brasileño Luiz Felipe Scolari, le dejó anoche al descubierto el Chelsea al confirmar a través de su página web su fichaje para la próxima temporada. Es cierto que, tras el encuentro contra la República Checa, quien hiciese campeón mundial a Brasil en 2002 y subcampeón europeo a Portugal en 2004 se había negado a revelar su destino a pesar de la insistencia de los periodistas: "Yo vivo en cualquier lugar y estoy preparado para cualquier cosa". Pero lo que Felipão no pudo reprimir fue el deseo del Chelsea de hacer pública de inmediato la contratación del que calificó como "uno de los mejores entrenadores del mundo"."Me sienta bien el blanco... El blanco de Portugal". Aun jugando con las palabras, con el atuendo de su selección ayer y el del Madrid, en el que muchos le sitúan ya, Cristiano Ronaldo sí se preocupó de ser ambiguo cuando abandonó el estadio feliz por su protagonismo en la victoria. "Estoy satisfecho por haber ayudado al equipo a ganar. Hemos jugado bien", dijo; "ha sido muy difícil penetrar en la defensa checa durante la primera parte, pero insistimos y en la segunda encontramos la recompensa a nuestro esfuerzo. Cada uno de nosotros se ha sacrificado por el conjunto. Hemos tenido muchas ocasiones y el saldo de tres goles no está nada mal".El bota de oro le ganó la partida a Cech, uno de los mejores porteros, en un duelo que evocó el que mantuvieron en la final de la Copa de Europa en Moscú. Ronaldo marcó entonces el gol del Manchester United, pero después el meta del Chelsea le paró uno de los penaltis en la serie que, aun así, dio el triunfo a los de Alex Ferguson."Ha sido un éxito de todo el equipo", destacó Scolari. "El espíritu del colectivo se impone sobre las individualidades", prosiguió; "hemos cumplido nuestro primer objetivo, alcanzar los cuartos". "Los checos nos han sorprendido con la alineación de Baros en vez de Koller", reconoció; "no estábamos preparados y nos desestabilizó. Y hay que tener en cuenta que nuestro rival obliga a un esfuerzo físico muy grande para poder batirle".
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