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Arriola coge el testigo de Buen con el reto de la reválida autonómica

El nuevo líder del PSE guipuzcoano procede del 'laboratorio' de las alcaldías

No habrá tensiones. Sólo la emoción que suele acompañar a los momentos en que se produce un cambio de ciclo como supone el relevo del líder provincial de un partido como el PSE. La sustitución de Miguel Buen por Iñaki Arriola al frente de los socialistas guipuzcoanos en el congreso provincial que se celebra hoy en San Sebastián, representa la continuidad que parece garantizada al ser el número dos quien asciende a la posición de líder. Aún y todo, el cambio en la cabeza de un partido es un movimiento que puede tener un significado importante según la proyección que vaya adquiriendo el nuevo protagonista.

Tiene a su favor el talante pactista que ha demostrado al gobernar Eibar

Arriola ( Eibar, 1959) procede del laboratorio político que tiene el socialismo guipuzcoano con esa surtida cantera de alcaldes que tan buenos resultados políticos le está dando. El todavía primer edil eibarrés -ya ha anunciado que dejará la alcaldía, en la que será relevado por Miguel de los Toyos- ha ido cosechando votos desde que hace tres mandatos encabezó la lista en ese municipio con tradición socialista. Además, se prodiga en buscar acuerdos, que ha ido alcanzando con sus oponentes teniendo incluso la mayoría absoluta que revalidó en las municipales de hace un año.

Esta confianza y buena imagen que proyectan los socialistas guipuzcoanos, basada en hechos como la consecución de gobiernos "incluyentes" que buscan el pacto frente a la bronca municipal, contribuyó a que ganasen por vez primera unas elecciones al PNV en Guipúzcoa en las forales de 2007, éxito que reeditaron y mejoraron en las generales del 9-M. Ello les coloca en una privilegiada posición para intentar ganar en las próximas elecciones autonómicas, cuya convocatoria se perfila para el otoño de este año.

Ese es el reto que Arriola tiene ante sí: mantener la primacía de votos en Guipúzcoa en unas autonómicos, los únicos que le quedan al PSE por ganar, y contribuir al acceso de Patxi López, quien hoy cerrará con un discurso el congreso que elegirá a Arriola, a la presidencia del Gobierno vasco. Tiene para ello bastantes factores a su favor, entre otros la imagen de partido dialogante cultivada por el presidente Rodríguez Zapatero y apuntalada en ese talante pactista ya demostrado por el PSE en los municipios. Y practicado con el Ejecutivo foral, cuyos gobiernos minoritarios ha estado sosteniendo durante años con acuerdos presupuestarios.

Otro factor favorable es la confianza que los socialistas han logrado transmitir a los ciudadanos de que respetan y no ponen en riesgo asuntos tan sensibles como la lengua o la cultura vasca, algo también demostrado en sus distintas políticas municipales.

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Nada de esto es nuevo para Iñaki Arriola, quien siempre ha defendido el socialismo vasquista como estrategia de implantación del PSE en la sociedad vasca, para cuya normalización considera imprescindible un acuerdo de convivencia del socialismo con el nacionalismo. En esta línea, la adopción de simbología vasquista por parte del PSE, como lo hizo en el reciente acto de celebarción del Día de la Rosa en Barakaldo, supone un factor de normalización.

Un apoyo casi unánime

El PSE guipuzcoano vive momentos dulces, sin tensiones ni cuestionamientos de la línea política o del liderazgo como ha solido ocurrir en épocas anteriores. Las duras condiciones que soportan en su vida cotidiana los afiliados y cargos socialistas sometidos a la amenaza de ETA, no están agravados, afortunadamente para ellos en esta época, con las tensiones y divisiones internas que pueden desgastar la moral más férrea.

Arriola se presenta hoy como único candidato a suceder a Miguel Buen en el cargo de secretario general del PSE guipuzcoano. No tiene adversarios y la línea política que defiende y representa, continuista con la de su predecesor y alineada en la corriente que lidera Patxi López, está refrendada por los votos y asumida por la mayoría de la militancia como el mejor bagaje para tratar el asalto a Ajuria-Enea en las próximas autonómicas.

La llegada de Iñaki Arriola al frente del partido en Guipúzcoa no sólo no tiene detractores, sino que la ejecutiva que ya conoce y va a encabezar espera un respaldo de más del 90% de los votos de la asamblea que se celebra en la mañana de hoy en un hotel donostiarra.

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