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Crónica:Gran Premio de China
Crónica
Texto informativo con interpretación

"Los campeones no se quejan"

Lorenzo dice que incluso llegó a divertirse pese a que apenas podía moverse

Oriol Puigdemont

Sentado en la silla de ruedas que le acompaña desde el viernes, cuando salió escupido de su Yamaha y se estrelló contra el cemento, Jorge Lorenzo se confesó contento con un cuarto puesto con aires de proeza. "Me sabe como una victoria porque apenas podía moverme", dijo Lorenzo, que antes de la carrera recibió seis pinchazos en los dos tobillos.

La carrera se complicó aún más antes de tomar la salida. Al arrancar en la vuelta de formación, el español soltó demasiado rápido el embrague y caló la moto. Sus mecánicos saltaron inmediatamente el muro, le empujaron y Lorenzo pudo arrancar de nuevo y reemprender la marcha. Un susto, otro. Cuando se apagaron los semáforos, se desató la locura. Desde la cuarta plaza, Giorgio vio cómo los más rápidos se le escapaban sin él tener armas para defenderse mientras los que venían por detrás se le tiraban al cuello. Primero Hayden, que le arrebató la quinta plaza, y luego Dovizioso, Capirossi y Melandri. Los movimientos de Lorenzo, siempre decididos, se volvieron torpes al tiempo que él se mostraba miedoso al inclinar la moto. En la octava vuelta, el bicampeón de dos y medio circulaba octavo a nueve segundos de Rossi. Y entonces despertó. "Si el asfalto no está al ciento por ciento, siempre tomo demasiadas precauciones al principio. Pero, a medida que han ido pasando las vueltas, he ido superando a muchos pilotos, más que nunca antes en MotoGP, e incluso he llegado a divertirme", reconoció el mallorquín, que ayer cumplió 21 años.

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Hace algún tiempo que Lorenzo descubrió los libros de autoayuda, en los que se sumerge siempre que tiene un momento. De ellos ha aprendido a hacer todo lo posible por eliminar las barreras mentales que uno mismo puede crearse. Su objetivo a la hora de explicar un mal resultado siempre es el mismo: no poner excusas. "Los grandes campeones no se quejan. En la vida, todo son experiencias. La que he vivido este fin de semana ha sido de las más importantes", confesó Lorenzo, que hoy mismo, en cuanto llegue a Barcelona, se irá a la Clínica Dexeus para que le examinen los tobillos. Sobre la carrera de Rossi, tan sólo una reflexión. "Lo que ha ocurrido

demuestra que hay gente que quiere enterrar a los pilotos antes de tiempo", le piropeó Lorenzo.

Los mecánicos colocan una protección en el antebrazo a Jorge Lorenzo antes de la carrera.
Los mecánicos colocan una protección en el antebrazo a Jorge Lorenzo antes de la carrera.AFP

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