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Reportaje:26ª jornada de Liga

Tótem Diarra

Los compañeros del medio malí aseguran que el Madridle necesita porque proporciona equilibrio defensivo

Diego Torres

"¿Estás preparado?", le preguntó un empleado del Madrid a Mamadou Diarra, el lunes pasado, tras la derrota ante el Getafe. El jugador de la estirpe de los Diarra, nombre ligado a la aristocracia del Níger desde tiempos mitológicos, andaba inquieto. Como una pantera enjaulada. Circulaba por los pasillos de Valdebebas con la zancada elástica que le caracteriza. Se sentía frustrado por no haber podido ayudar al equipo y un poco herido por las críticas que le señalan como un futbolista sin clase. Al cruzarse con alguien que le interpelaba de esa manera, empleó su lengua como un látigo: "¿Preparado? ¿Preparado para poner mi culo en el banquillo? ¡Eso hice contra el Getafe! ¡Sentar mi culo!".

Diarra, a quien Fabio Capello, a falta de un criterio científico, definía como "un ganador", ha sido objeto de controversia dentro del club. Su ausencia durante la Copa de África facilitó la inserción de Gago entre los titulares, colmando el reclamo de un sector de la hinchada y propiciando la experimentación a Bernd Schuster. El entrenador mezcló a Gago con Guti con sentido lógico. Como dice un técnico: "Gago nos dio más fútbol que Diarra. Ofreció ayudas a Guti y, además, robó balones. En los partidos de casa pensamos que no necesitábamos tanto el trabajo defensivo de Diarra. Pero no hay nada definitivo".

El resultado de poner a Gago durante siete jornadas por delante de los centrales no ofreció datos concluyentes. Más bien, inquietantes. Desde el 13 de enero, el Madrid obtuvo cuatro victorias y tres derrotas. La ventaja de puntos sobre el Barcelona se recortó de ocho a dos. Si la Liga hubiese empezado cuando Diarra se fue a África, el Madrid sería el quinto clasificado.

Schuster ha obrado según la lógica. Pero -Capello lo sabe- en el fútbol los aspectos espirituales tienen un peso decisivo. Entre los jugadores del Madrid se extiende la sospecha supersticiosa de que Diarra ejerce una influencia protectora. Como un tótem. "En el fútbol hay cosas que no se pueden explicar fácilmente", dice otro miembro del cuerpo técnico.

Baptista manifiesta de este modo el sentir de una parte del vestuario: "Gago tiene calidad en el pase, pero en un equipo como el Madrid, en el que todos van para adelante, tener un especialista como Diarra es fundamental. Sin Gago perdemos calidad, pero sin Diarra perdemos equilibrio". No tendrá que elegir hoy Schuster ante el Recreativo porque Guti está lesionado. Jugará Gago. Y Diarra.

Diarra, en un partido frente al Racing.
Diarra, en un partido frente al Racing.ÁLVARO GARCÍA

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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